José Manuel Gómez Gufi
#miAñoFlamenco 2017 – GUFI
Entiendo a los que aún no se han acercado al flamenco, produce vértigo, especialmente entre los periodistas musicales de otras músicas. Mis colegas latinoamericanos me insisten para que desentrañe el fenómeno Rosalía, una cantante que, por edad, debería hacer trap. Ha debutado con un disco cien por cien flamenco. Veo su concierto desde el gallinero del auditorio de Cartagena, ahí no importa cuantos seguidores tienes en instagram o si eres la mujer barbuda. Veo a unos flamencos mosqueados como si la chica le hubiera quitado el curro a alguien.
-Naaa
Tiene un público nuevecito, a estrenar. Pero entiendo el mosqueo de los guitarristas, Refree ha acabado con el mito de Paco de Lucía: estudiar hasta que la velocidad de la luz y de las falsetas te permiten llegar a la luna. Refree toca la guitarra como los antiguos y su guitarra se parece a un trabuco o a la de los Ramones. Mola.
Rosalía ha hecho trap (con Tangana) pero yo prefiero el rollo de Moncho Chavea, Original Elias, Omar Montes, JCA… el nuevo sonido Caño Roto aunque Moncho es de Pan Bendito. Convierto mis revelaciones en “Mucho trap, un poco de flamenco y algo de hip hop” en mi programa en Gladyspalmera.com y la gente flipa, pero Moncho y Elías se presentan en el “Madrirumba” y estamos los de siempre. Ni un solo colega se ha interesado por conectar con una generación destinada a arrasar (o no). Me dicen que he descubierto un filón, parece un sarcasmo hablando de un tipo como Moncho que tiene millones de visitas en Youtube.
Visito a la familia Camarón antes de la presentación de su concierto en el Conde Duque y se hace evidente que la generación del trap ha incorporado a Camarón entre sus mitos. El concierto de Madrid es un homenaje de los músicos que arroparon a Camarón y Paco cuando creció el flamenco. Rubem Dantas, Jorge Pardo, Carles Benavent, Tino Digeraldo.
LO JURO
La Fundación Cruzcampo me invita a formar parte del jurado compás del cante, me piden que proponga tres nombres vivos con trayectoria. Los míos son: Jorge Pardo, Israel Galván y Diego Carrasco. Los retiro cuando veo que aparece el nombre de Rafael Riqueni. Rafael siempre me ha emocionado, aportaba fragilidad (y riesgo) a Morente y su disco “Parque de Maria Luisa” es una delicia que interpreta en el Flamenco on Fire de Pamplona con banda y en solitario en el café Berlín. En un bar el silencio es arte.
Entre los jóvenes gana Patricia Guerrero y se ofrece una mención especial a Camarón… Hay que compadecer a todos los jurados que encontraron a otros artistas a los que apoyar desde 1984. Faltan premios, tenemos artistas de sobra y NO HAY GUIRIS PA TANTO FLAMENCO. En Madrid coinciden tres festivales y cinco programaciones de interés. En los periódicos nos miran como si les quisiéramos quitar el sitio al rock, al jazz y a la contemporánea. Los toros son sagrados, parece que es una cuestión de patriotismo, los tópicos encima de la tele: los toros, la bailaora y una guitarra. ¿Alguien recuerda un programa de flamenco en TVE?
Vale, ¿además de “Rito y Geografía del cante”?
No sé cómo estarán los toros… pero no hay megas suficientes para hablar de baile y de guitarra y si añadimos géneros como el flamenco-jazz… hay que irse a la exportación y/o el exilio.
EN NUEVA YORK
Rodeado de flamencos Nueva York me parece pequeño. Nieva, Central Park se cubre de blanco y llego a la salida del matinal que ofrecen a los niños de varios colegios que salen serios y disciplinados del flamenco. Los 2000 niños que han llenado el teatro han nacido después del 11 de septiembre. Nadie se sale de la fila ni se escapa para pisar la nieve. La fundación autor lleva jazz (Josemi Carmona & Colina/ Alfonso Aroca y UHF) Triunfan. En el festival flamenco Olga Pericet me deslumbra como la puesta en escena de Manuel Liñan.
EL BAILE
El flamenco sale del armario con un festival paralelo a la celebración del orgullo Gay. El filósofo y bailaor Fernando López ha publicado un libro que es complementario a un espectáculo que es didáctico y sensitivo. La Chana reaparece y compone una estampa insuperable con Rocío Molina a sus pies. Me cuenta Patricia Guerrero que está haciendo el Quijote con Andrés Marín en Francia. Hay un batallón de contemporáneos que prefiere el exilio a bailarse encima.
Por fin veo Shongai 2 y ¾ en Fes Marruecos, a mitad de camino entre Mali y Madrid. Ketama nunca hizo gira con el Shongai 2 y nos debían un concierto así, se lo debían a ellos Josemi y Juan Carmona, Javier Colina, Toumanai Diabaté. Los padres (daneses) de Christhina Rosenvinge son aficionados al flamenco, por eso vinieron a España. Lo cuenta ella que le ha dado una letra a Rocío Márquez que canta sin guitarras.
GUITARRAS
Agustín Castellón Bola publica la segunda edición de su libro sobre Ramón Montoya. Gamboa el libro de Serranito. Coincido con Pepe Habichuela en el tren de vuelta de Pamplona que se ha hecho más fotos con la peña que Kiki Morente (estupendo con Juan Habichuela Nieto y fantástico con David Carmona) Nos cae una manta de agua en Atocha. No vuelve a llover en Madrid, en el homenaje a sus 60 años en el tajo se multiplican los momentos. Acordarse de las cuerdas: Paquete, Diego del Morao, Rycardo Moreno y Josemi Carmona. ¡Ojú en el Berlín!
¿Hemos hablado del cante? La Negra en Tanger, Naike Ponce o Sandra Carrasco donde sea. Acordarse de los cuerdos y los locos. Raúl Rodríguez. El Pele con Lin Cortés y el trío. Joaquín Grilo y Tomasito. He entendido el cante de José Valencia con Diego Carrasco de traductor. El Niño de Elche canta a Miguel Hernández para un público familiar ajeno a sus conquistas en el Sonar, el rock o las vanguardias. El libro “Crónica Jonda” de Silvia Cruz Lapeña sirve para entender el flamenco tanto como para entender a Silvia, más o menos lo que queremos todos, que lo que vivimos tenga un poco de sentido.