JOSÉ EL FRANCÉS, MELAZA Y SEX-APPEAL
En la década de los ochenta, paralela a la Movida, reventó una música
mestiza, con unas profundas raíces flamencas que se convirtió en una especie
de manantial sagrado, del que todo el mundo esperaba un milagro particular.
Algunos despuntaron y deslumbraron en ese hervidero; otros tantos quedaron
en agua de borrajas. Entre los primeros se encontraba, con carisma y sesgo
harto personal, José Rodríguez Vázquez, más conocido como JOSÉ EL FRANCÉS,
gitano de origen español, nacido en Montpellier en 1971 y vecino de los
Gipsy King.
Con él surgió por primera vez en la historia de los círculos flamencos con
fuerza de ciclón, el fenómeno «grupy»… Su primer trabajo, «Las Calles de
San Blas» alcanzó ventas espectaculares, sin apenas apoyo promocional. Las
muchachitas se aglutinaban en largas colas para comprar su disco o su
entrada y comprobar así, en directo, el poder de una seducción tan sutil
como embaucadora, que llevó a El Francés a convertirse en el «príncipe azul
gitano» de los sueños adolescentes femeninos…
Una tremenda sensibilidad, cierto aire cándido, desvalido, que despierta el
lado más maternal y protector de cualquier fémina, aderezado con logradas
dosis de masculinidad, y unos ojos negros de profundidad vertiginosa,
contribuyeron sobremanera a la configuración de este ídolo.
Pero el que empezó siendo artista reclamado por jovencitas, traspasó las
fronteras de la edad y el sexo, acaparando al gran público, a la masa
social, pues José nos habla del sentimiento que mueve el mundo: el amor. De
hecho, sus conciertos están preñados de público heterogéneo y universal,
como corresponde a su música, como corresponde a El Francés. Recordemos que
en la presentación del anterior trabajo, «Alma» (más de 300.000 copias
vendidas), congregó desde modelos famosas, a grandes músicos, amén de sus
seguidores, y además, curiosamente se encontraban- junto al respetable
público anónimo- reconocidos comunicadores e importantes personalidades de
la cultura…
Nos encontramos pues, ante un artista que sin duda remueve masas y que
suscita el interés en todos los recodos sociales.
Una vida escabrosa le apartó algunas temporadas de los estudios de
grabación. Pero regresó con «ALMA» en 1999, arrasando con una fuerza propia
del huracán Mitch, que llevó al autor de «Ya no quiero tu querer», a vender
más 300.000 copias…
Vuelve EL FRANCÉS, pletórico, dispuesto a comerse el mundo por donde haga
falta, ahora con un poderoso trabajo bañado en el pop más romántico y de
actualidad bajo título «JUGANDO AL AMOR». El album está lleno de contenidos
emotivos y baladas suaves, en clave de pop, con sesgos franco-flamencos e
italianizantes, una continuación evolutiva derivada de la línea melódica
iniciada en el anterior, «Alma».
Saboreamos en «JUGANDO AL AMOR» la sensibilidad que como autor también
desprende José El Francés. Encontronazos con amores y el infinito universo
que estos sentimientos destapan, siguen siendo la fuente inagotable que
surte el corazón de José El Francés….
«El Corazón», cuya letra nos habla de verdades como puños que llevan al
desamor y a sentimientos próximos a la catarsis amorosa. Un tema con
pegadizo estribillo y gran ritmo interno. «Camino de ningún Lugar», precioso
corte que define la linea musical que nos propone José El Francés, donde nos
hayamos ante un tema que nos conduce inexorablemente al ritmo y a
identificarnos con cada verso, puesto que cualquier humano, en mayor o menor
medida, hemos sido víctimas del amor. El sonido es pop actual puro, el
terreno donde El Francés se mueve con auténtica maestría interpretativa y
emocional. Encontramos colaboraciones que disparan con flechas de fuego,
Laura Pausini, en «Dime», poderío…Y como dice el refranero español que es
de bien nacidos el ser bien agradecidos, José ha querido rememorar un
bellísimo tema que, junto a «Ya no quiero tu querer» englosaba el primer
volumen de Jóvenes Flamencos, es decir, «Besos de Caramelo» que cantaba La
Aurora, tema compuesto por los Ketama más Carmonas (Antonio, Juan y Josemi),
quienes han vuelto a poner su pluma al servicio de El Francés en algunos de
los temas que completan «Jugando al Amor».
La esmerada producción corre por cuenta de José Luís Garrido, músico y
técnico de sonido de amplio bagaje y contrastada entidad (Camarón, Paco de
Lucía, Ketama, José Mercé…) y, ahora, nuevamente, por segunda vez, JOSE EL
FRANCÉS…. porque no podía ser de otra manera.
JOSÉ EL FRANCÉS es un artista formado en la sensibilidad de la palabra
precisa que caracteriza a los galos, en la dulzura apasionada del pueblo
italiano y en el terremoto visceral que simboliza el flamenco…Todo ello es
El Francés, el más romántico pop de nuestros dias…
¿Existe alguien más próximo a la universalidad?
Carmen Salmerón 2002.