XLII Gazpacho Andaluz José Menese, Carmen Linares, Cancanilla de Marbella, Marina Heredia, Luis el Zambo. Juana Amaya

XLII Gazpacho Andaluz
“Diego en el Recuerdo” Homenaje a Diego del Gastor
en el centenario de su nacimiento
Viernes y sábado, 25 y 26 de julio, 2008. 2230h.
Morón de la Frontera (Sevilla)

 


Texto y fotos: Estela Zatania

GAZPACHO ANDALUZ: Cante: José Menese, Carmen Linares, Cancanilla de Marbella, Marina Heredia, Luis el Zambo. Baile: Juana Amaya y su grupo. Guitarra: Luis Mariano, Antonio Carrión, Antonio Moya, Paco del Gastor.

Este año el pueblo de Morón de la Frontera está celebrando el centenario del nacimiento de su figura flamenca más representativa: la del guitarrista Diego del Gastor.  Ha habido actos en El Arahal, Arriate, y más recientemente, en Ronda para recordar a este recurso natural que llegó a figura de culto en Estados Unidos mucho antes de que fuera conocido en su propio país, y décadas antes de que llegara Son de la Frontera para rendir homenaje a su mayor inspiración musical.

A lo largo de la semana en Morón se ha ofrecido una diversidad de actuaciones, con artistas locales e invitados, y el viernes fue designado como el día de homenaje.  En los últimos años 60, hasta primeros de los 70, el norteamericano Don Pohren escribió acerca del flamenco de Morón en general, y Diego del Gastor en particular, inspirando a numerosos extranjeros, principalmente estadounidenses, a hacer el viaje a este tranquilo pueblo en el noreste de la provincia de Sevilla.  Un considerable número de veteranos de aquellos años, ahora personas mayores con el pelo canoso, acudieron a la plaza de toros de Morón para recordar esa movida y volver a encontrarse con viejos amigos.

La velada de viernes empezó con las actuaciones de los jóvenes nietos del maestro Paco del Gastor, sobrino de Diego, continuidad y actualización de una escuela gracias al buen gusto y los conocimientos del abuelo Paco.  También defendieron la calidad del flamenco local los cantaores Antonio Ruiz “El Carpintero” o Paco Camacho entre otros. 

La noche terminó con el moronense bailaor Pepe Torres, que ya pertenece al mundo.  Su colaboración con el popular grupo Son de la Frontera, le ha ganado seguidores por todo el mundo debido a la extrema elegancia de su baile, y su estilo intensamente flamenco.

Carmen Linares y Salvador Gutiérrez
Juana Amaya
Paco del Gastor
Luis el Zambo & José Ignacio Franco

El venerable Gazpacho Andaluz celebrado el sábado, uno de los primeros festivales de la época, ya va por cuarenta y dos ediciones.  Siguiendo la tradición de abrir con un solo de guitarra, Paco del Gastor exhibió su maestría tocando por soleá con bulería final, combinando el fraseo y pulsación característicos de Morón, con armonía e ideas musicales actuales.  Se escucha un emotivo “¡ole abuelo!” de uno de los críos que había tocado la noche anterior.

Cancanilla de Marbella, un veterano a descubrir.  En los tiempos que corren, escasean los cantaores tradicionales, y Cancanilla, sin ser Terremoto ni Antonio Mairena, llena el vacío muy eficazmente gracias a sus conocimientos, y largos años de profesión.  Acompañado por el toque sabroso de Antonio Moya, cantó por soleá, siguiriya, tientos tangos y bulerías con la pataíta, o más bien el patatón con el que siempre remata sus actuaciones.

Debido a su trabajo de investigación y recopilación, Carmen Linares ha ganado el respeto absoluto de los aficionados a pesar de no ofrecer un tipo de cante que suele gustar por estos lares.  Es altamente profesional, enciclopédica, metódica en todo lo que hace, con un exquisito paladar.  Pero es en los cantes libres, especialmente el cante minero, donde mejor luce su capacidad musical. En esta ocasión viene acompañada hábilmente por Salvador Gutiérrez.

En un cartel que resultó ser de los más variado y con mucha calidad, a continuación tuvimos el placer de disfrutar del cálido sonido del jerezano Luis el Zambo con José Ignacio Franco a la guitarra.  Tan auténtico y natural es el planteamiento de Luís –te canta como si estuviera en la cocina de casa– que en algunas de sus actuaciones falta brillantez, esa chispa permanente que los pulidos profesionales despachan como si abrieran y cerraran un grifo, y que les permite mantener cierto nivel pase lo que pase.  Y precisamente esa naturalidad es el valor añadido del cante de Luís.  En esta ocasión cantó muy a gusto por siguiriya, fandangos, soleá y bulería, cerrando así la primera parte.

Cancanilla de Marbella & Antonio Moya
José Menese
Marina Heredia & Luis Mariano
Pepe Torres

Después de la degustación del gazpacho, la guapa granadina Marina Heredia vino a ofrecer su arte acompañada por Luís Mariano a la guitarra.  Es una cantaora que cultiva el cante clásico siempre a través de sus inquietudes y una personalidad joven.  Vestida de largo, con grandes lunares, cantó por cantiñas con un coro de voces, luego soleá de Triana, siguiriya, tangos con todo el sabor de su tierra y bulerías.
 
José Menese del pueblo vecino de La Puebla de Cazalla recuerda como en el Gazpacho del ’64 Diego del Gastor se ofreció para acompañarle, una actuación que ha quedado para la historia.  Nos cuenta que esta misma tarde ha nacido un nieto suyo que se llamará “Mariano”, y a continuación canta por marianas, un cante casi olvidado que siempre ha cultivado.  El viejo niño prodigio sigue rigurosamente su línea clásica, y como suele ocurrir en el flamenco, su lucha con las facultades mermadas es enriquecedora.  Antonio Carrión le acompaña sabiamente por tientos, soleá y siguiriyas “para todos los gitanos y los que no lo sean”.

El broche de oro es la bailaora Juana Amaya, otra artista local convertida en figura mundial.  Vestida de un hermoso color cobre, y con el cante de Miguel Lavis, David el Gallí y Enrique el Extremeño, un solo baile, de larga duración, pone al público en pie y clausura esta edición del festival.


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