XXIV FESTIVAL DE JEREZ
Martes, 3 de marzo, 2020
COMPAÑÍA FLAMENCA LA LUPI “Lenguaje oculto”
Teatro Villamarta, 2100h
Galería fotográfica – video
Baile: La Lupi, Iván Amaya, Pol Vaquero, Marina Perea. Guitarra: Óscar Lago, Curro de María. Violín: Nelson Doblas. Percusión: David Galiano. Cante: Alfredo Tejada, Cristo Heredia. Artistas invitados (cante): Makarines. Dirección artística: La Lupi. Dirección de escena: Juan Dolores Caballero. Tema clásico: Torija (Elegía) de Federico Moreno.
En la recta final del Festival de Jerez, sigue habiendo propuestas de gran interés y novedad. El martes día 3 le ha tocado el turno a la malagueña veterana Lupi. Y de su veteranía la bailaora no huye, sino que la abraza y cultiva como hilo argumental de la obra “Lenguaje oculto”. De esta manera, la que fuera maestra en su día de la joven Rocío Molina, busca expresar y descargar tensiones y preocupaciones asociadas con la madurez de la mujer.
Sin haber leído el libreto de antemano, este argumento no subió a la superficie, ni falta que hizo. Parece más enriquecedor dejar que un trabajo de esta naturaleza te llegue y te inunde de sensaciones espontáneamente, sin intelectualismo que a veces roza la traición artística. De hecho, el punto fuerte de esta obra onírica es su capacidad de funcionar a diversos niveles. Habiendo rechazado el nivel intelectual analítico, el espectador es libre de revolcarse en imágenes y situaciones que te dejan frotando los ojos, preguntándote si lo que acabas de ver realmente ocurrió. Es una pintura surrealista de Magritte hecha movimiento.
Desde el comienzo de la obra, cuando Lupi parece luchar para librarse de un capullo de gasa, hay una frescura inocente que te obliga a prestar atención, “a ver qué va a pasar ahora”. El compás de seis tiempos abriga y acomoda numerosas colocaciones y combinaciones de personas e imágenes, y queda como bulerías de un mundo paralelo.
Lupi estrena lo que casi puede convertirse en accesorio para el baile: un bolso rojo que lleva cual Marujilla, pero no va de compras sino de siguiriyas y cabal con las voces de Alfredo Tejada y Cristo Heredia. Es cuando vemos la expresión del desamor, aquella calamidad tan mediterránea.
Hojas blancas por el suelo se forman en pequeños remolinos con cada movimiento de mantón, con cada vuelta o pisada, un hombre de poca estatura aparece como volantes de la bata de cola de la bailaora. De un momento para otro, Lupi convierte lo bello en grotesco y nuevamente en bello, una fiel metáfora de la vida misma en la versión de una bailaora entregada que no para de arriesgarse y comunicar su verdad.
NOELIA SABAREA “Las quijanas-Las cuatro locuras de Quijote”
Sala Compañía, 1900h
Galería fotográfica – video
Baile: Noelia Sabarea, Alejandro Rodríguez. Guitarra: Luis Medina. Cante: Rafael “El Calli”, Manuel Peralta. Percusión: Javier Rabadán. Coreografía: Javier Latorre, Noelia Sabarea. Dirección escénica: Javier Latorre. Dirección musical: Luis Medina.
En la Sala Compañía. Noelia Sabarea presentó su trabajo “Las quijanas-Las cuatro locuras de Quijote”, con la coreografía y dirección escénica del polifacético Javier Latorre.
Del clásico Quijote, la bailaora alude a cuatro mujeres clave, Dulcinea, Maritornes, Dorotea y Marcela, en busca de una nueva dimensión para su propio desarrollo artístico. Noelia es una joven promesa a tener en cuenta, rezuma desparpajo y energía y se le ve decidida a comunicar su mensaje mediante movimientos frescos y originales. Alterna sus bailes con Alejandro Rodríguez que interpreta temas clásicos con o sin voz, además de un paso a dos a música lírica. Noelia interpreta cantiñas, unos tanguillos cruzados con bulerías y siguiriyas, entre otros temas. Aporta mucho el hermoso vestuario de la bailaora, que ni el tópico del negro ni lunares de color.
