Texto: Manuel Moraga
Fotos & video: Rafael Manjavacas
MÁS ALLÁ DE LA METÁFORA
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Sara Calero
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Dirección, baile y coreografía: Sara Calero; Cante: Gema Caballero; Flauta: Bruno Duque; Cello: Sergio Menem; Guitarra: Amir Haddad Zona Cero. Una metáfora de “los cambios de etapa a los que nos expone la vida, obligándonos a partir del origen”. Esta es la idea que trabaja Sara Calero en este espectáculo que ha estrenado en el Teatro Pradillo, dentro del ciclo La Otra Mirada del Flamenco.. Y efectivamente, la idea no solo se aplica a la propuesta, sino al propio crecimiento personal de la artista. Buen comienzo y buen final. En medio, un gran abanico de posibilidades. Sara Calero es una bailarina muy experimentada, forjada en la disciplina de la danza y ahora también, inquieta y preocupada por no solo por interpretar, sino también por crear su propio rastro. Este último paso es probablemente el más complicado para un artista. La bailarina tiene un cuerpo esculpido por y para la danza, y técnicamente es irreprochable. Ahora tiene que poner esas cualidades al servicio de la creación.
Hablábamos de un amplio abanico de posibilidades, y ciertamente es así. Sara Calero fue exhibiendo su conocimiento y dominio de diferentes escuelas dancísticas. Comenzó con una aproximación al folclore y terminó con su interpretación personal de la serrana. Por el camino, incursiones sutiles en el flamenco (abandolaos, guajira, etc.) y reflejos de escuela bolera y ballet español. La puesta en escena es sencilla. Pocos recursos que juegan su papel. Tampoco se trata de una obra escénicamente pretenciosa, sino que lo que manda es la desnudez musical y dancística, de modo que podemos hablar de corrección, es decir, de coherencia entre fondo y forma. Merece destacarse, desde luego, el trabajo musical, donde encontramos la voz privilegiada de Gema Caballero, que hace un rico despliegue de recursos. Hemos de decir que el registro que más nos gusta en ella es la voz aterciopelada con que es capaz de expresar los cantes, pero en esta ocasión no pudimos disfrutar mucho de esos matices, quizá porque el espectáculo tampoco lo exigía. También interviene en la composición musical el guitarrista Fernando de la Rua, aunque no está físicamente en el escenario. Aprovechemos para comentar que este excelente músico, Fernando de la Rúa, está a punto de publicar su primer trabajo discográfico en solitario. La música de Zona Cero se debe también a Bruno Duque, Sergio Menem, Pedro Esparza y Raul Márquez. Y en escena tenemos a Bruno Duque en los vientos, Sergio Menem en el Celo y a Amir Haddad en la guitarra.
Volviendo al baile, queremos subrayar la idea de versatilidad que muestra Sara Calero, pero también entendemos que lo importante en un artista es la personalidad. Sara Calero tiene mucha materia prima y un gran conocimiento de lo que se lleva entre manos. Nosotros la animaríamos a trabajar por encontrar su personaje, a buscar una huella suya, una firma propia, reconocible y diferenciadora. Como decimos, tiene los depósitos cargados y su gran reto es buscar la forma de ir soltando con personalidad todo ese capital. En realidad, eso es lo más difícil en todos los terrenos de la vida, y sobre todo, en el arte. En nuestra opinión, esas señas de identidad las vimos más claras en pasajes como la serrana, los abandolaos o la idea de los cantares a ritmo de panaderas. Sara Calero se encuentra, sin duda, en una –nueva- Zona Cero de su carrera artística… Y estamos seguros de que nos sorprenderá más de una vez. |
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