Texto: Estela Zatania
Fotos: Ana Palma
Sábado, 27 de febrero, 2016. 2100h, Teatro Villamarta, Jerez de la Frontera
Especial XX Festival de Jerez – Toda la información
Sara Baras vuelve a enamorar al público
Bailarines: Sara Baras. Artista invitado: José Serrano. Cuerpo de baile: María Jesús García Oviedo, Charo Pedraja, Cristina Aldón, Daniel Saltares, David Martín, Alejandro Rodríguez. Director musical: Keko Baldomero. Guitarra: Keko Baldomero, Andrés Martínez. Cante: Rubio de Pruna, Miguel Rosendo, Israel Fernández. Percusión: Antonio Suárez, Manuel Muñoz «Pájaro». Dirección, coreografía: Sara Baras.
Será esa cara con ojos chispeantes, serán los besitos que lanza como misiles al agradecido público, serán las telas diáfanas que hace volar y volar, o será simplemente que es una magnífica bailaora que hace años aprendió a darle al gran público lo que más feliz les hace: un tipo de flamenco popular y domesticado, sin complicaciones ni conceptualismo.
En esta ocasión, el vehículo ha sido su obra «Voces», un sincero homenaje personal de Sara Baras a los artistas del flamenco que ella siente como importantes referentes. No necesariamente los más relevantes de toda la historia del flamenco, sino aquellos que han dejado huella en la gaditana, y que han contribuido a componer su personalidad artística.
Tampoco las «voces» son todos cantaores. Le selección incluye a dos guitarristas, Paco de Lucía y Moraíto, dos bailaores, Carmen Amaya y Antonio Gades y dos cantaores, Camarón de la Isla y Enrique Morente; una selección de seis figuras referenciales con las que se dibuja medio siglo de flamencura y ange.
Como todas las producciones de Sara Baras, ningún detalle se descuida. Empezando por un gran equipo cantaor compuesto por Rubio de Pruna, Miguel Rosendo y el joven Israel Fernández, tres voces que saben entregar el cante más actual con un sabor del pasado. La música de Keko Baldomero es igualmente fresca sin dejar de oler al flamenco. El cuerpo de baile es de primera categoría, el diseño de iluminación, notable por el buen gusto y hasta la percusión es destacable y original.
Once escenas agrupadas en función de las figuras homenajeadas, incluye sus declaraciones en off…Paco de Lucía diciendo que hay que perfeccionar la técnica para olvidarse de ella y poder interpretar libremente, o Camarón que asevera que «sólo hay dos escuelas de cante: transmitir o no transmitir».
Admirablemente, no hay ánimo de imitar creaciones de las figuras, sino de evocarlas a través de una visión actual. La bailaora interpreta una farruca que nos hace recordar a Antonio Gades en Los Tarantos, o suenan hilillos de melodía de «Carmen» de Bizet para ambientar aquella pieza.
El repertorio es largo, e incluye la siguiriya bailada por Sara con José Serrano, la taranta de Sara, tangos de Granada versionados para recordar a Morente, la soleá de José Serrano, la soleá por bulería que inevitablemente relacionamos con Jerez y Moraíto o las bulerías en honor a Carmen Amaya que es retratada en un instante mediante una chaqueta corta con madroños que viste Sara.
Más de dos horas de flamenco fresco, estilizado, digerido por Sara Baras y servido sin miramientos. Al final, la bailaora tuvo palabras cariñosas para Manuel Morao, patriarca de la familia del mismo nombre, que se encontraba presente y en cuya compañía participó hace tantos años.
