FLAMENCO EN ESCENA
|
|||||
“Flamenquita, La niña que perdió el compás” Cuando algunos están abogando por la desaparición de los festivales de flamenco, la movida sigue evolucionando en su camino ascendente. La receta de las cálidas noches andaluzas y otros atractivos turísticos, combinado con la buena música y buen teatro, da el resultado de una oferta casi irresistible, tanto para extranjeros como nacionales. Ayer, jueves, 19 de junio de 2008, en el pueblo de Arcos de la Frontera (Cádiz), ciudad monumental y uno de los lugares más bellos del país, ha nacido otra iniciativa con ánimo de permanencia. A las 12 del mediodía la alcaldesa, Dña. Josefa Caro Gamaza, cortó la cinta virtual en una rueda de prensa con la presencia de los medios y varios principales artistas. A lo largo de cuatro días de intensa actividad, el primer Encuentro Flamenco en Escena está ofreciendo dieciséis espectáculos en diversos escenarios, además de un programa de actividades paralelas. Según el director del festival Curro Velázquez Gaztelu, Flamenco en Escena es un pionero en el género, con una oferta que está “a caballo entre el flamenco, la danza contemporánea y la clásica”, con la pretensión de “no confundir lo folclórico con lo escénico”. Es una clara apuesta por el flamenco vanguardista y experimental, hasta abarcar lo más arriesgado. “Danza, teatro, música, performance, circo, títeres y mucho flamenco” explicó Velázquez Gaztelu, familia de otro gran pionero como es José María Velázquez Gaztelu, responsable que la mítica serie Rito y geografía del cante. Lo de ayer, hoy y mañana se dan la mano estos días en Arcos, en este festival diseñado como “showcase”, para que programadores de todo el mundo tengan la oportunidad de conocer la diversidad del panorama más fresco. A media tarde, el pintor y escritor madrileño Antonio Valentín inauguró la exposición de su interesantísima obra, basada principalmente en retratos de conocidas figuras del flamenco. A las nueve de la noche, se abrió el programa de actuaciones con una divertida oferta dirigida al público infantil. Siguiendo la línea de espectáculos similares, el contenido es didáctico e interactivo. A las diez y media, en la plaza del Cabildo, fue presentada la obra El gitanito esquizofrénico, estrenada el año pasado en Málaga en Flamenco. Con la ausencia de David Pielfort, un personaje principal, tapada por Luis Lara, una serie de breves “situaciones” tipo comedia televisiva está brillantemente respaldada por el baile de Javier Barón y el cante de José Valencia, dos valores seguros, vayan donde vayan. Javier Patino proporcionó el acompañamiento de guitarra. A las once y media, en la plaza San Pedro, Asunción González ofreció “El duende no tiene nombre de mujer”, un largo monólogo salpicado de cante para representar la vida interior de Pastora Pavón, “Niña de los Peines”. En tres actos la polifacética protagonista plasmó la infancia, madurez, senectud y muerte de la legendaria cantaora. Esta primera velada se cerró con el plato fuerte, “Chanta la Mui”. En esta obra, tres magnificos bailarines, Daniel Doña, Olga Pericet y Marco Flores, éste natural de Arcos, bailan en grupo y en solitario, con cierta estética robótica, para desarrollar conceptos que se columpian entre oníricos e intelectuales, pero la impresión que más marca el espectador es la de la brillantez técnica de los tres componentes. click para ampliar.
|