Homenaje a Chano Lobato en el Teatro Falla de Cádiz, Matilde Coral, Juan Villar…

¡Va por ti Tío Chano!

Texto y fotos: Antonio Konde

Elenco Artistico: Antonio Reyes, Encarna Anillo, Felipe Scapachini, Carmen de la Jara, El Junco, Miguel Poveda, David Palomar, Juán Villar, Nano de Jerez, Mariana Cornejo, Antonio Higuero, Jesús Guerrero, Eduardo rebollar, Niño Jero, Antonio Carrión, Rafael Rodriguez, Alfredo Lagos, Diego Montoya, Perico el de la Chana, Tate Núñez.
Presentadores: Matilde Coral, Jesús Vigorra

No deja de ser algo emotivo esto de los homenajes. Pero en la mayoría de las ocasiones llegan tarde. Chano, nuestro Chano fue homenajeado en el Gran Teatro Falla de su tierra natal, Cádiz. Tarde. El Festival de Nimes así lo hizo, al igual que con Fosforito. El Festival de Cante de las Minas de la Unión se portó de igual manera en 2007. Sevilla hizo mismos honores en Marzo del mismo año. Pero Cádiz, su Cádiz, su bahía, hasta ahora no había encontrado el momento para rendirle honores, una vez fallecido. En cualquier caso, el gran teatro tembló con el cante sentido de un abanico de artistas que quisieron homenajear póstumamente al cantaor de Cádiz. Se cumple aquello de más vale tarde que nunca. Y aparte de esto, fue una noche mágica donde el duende de Chano se paseó por las butacas del coliseo.

Carmen de la Jara / Antonio Carrión	Miguel Poveda, Alfredo Lagos, Matilde Coral

Una nutrida representación del cante gaditano prestó su voz y sus manos para que perdure por siempre el espíritu de uno de los más grandes artistas que ha dado el flamenco.  

Coincidiendo con el día de la Patrona de la ciudad, un tributo merecido que fue presentado por el periodista Jesús Vigorra y Matilde Coral. De principio a fin, una sensación de nostalgia y de recuerdo nos embargó durante las más de tres horas de duración de la gala.

Ya en el comienzo, y después de las palabras de los presentadores, la voz de Chano se dejó oir contando una de sus tantas anécdotas que así las escuchemos 30 veces, nos parece que fuera la primera vez que la cuenta y con una gracia que siendo lo mismo se hace tangencialmente diferente.  Y eso es lo que tenía Chano, un carisma que llenaba teatros solo por escuchar sus historias. Si a esto le sumamos que nos trasladamos al pasado para volver a escucharlo, la emoción estaba servida. El encargado de abrir la noche fue el chiclanero Antonio Reyes, acompañado de Antonio Higuero a la guitarra. Tangos con marcado acento caracolero, y hasta el fandango de Morente sometido al compás de 4X4, pero acercándose al tiento, preludiaron su actuación. Por bulerías, el sello caracolero siguió adherido a su cante, hasta que el recuerdo de la Perla en la voz dulce del cantaor afloró. De Cádiz también, el cante de Encarna Anillo. Como gusta en Cádiz Encarnita. Se ganó al público acertando por alegrías y bulerías que finalizaron en un cuplé infinito que atenuó su entrega en el escenario. El toque de Jesús Guerrero, enérgico y apabullante en todo momento musicó el cante de la gaditana.

Felipe Scapachini	Mariana Cornejo, Carmen de la Jara, David Palomar, Junco, …

Artistas que ya salieron del término promesa para erigirse en firmes candidatos a poseer el apelativo de cantaores.

Una voz más que hecha, con años de experiencia y con sabor rancio es la de Felipe Scapachini. Profirió unas malagueñas melliceras que arrancaron los aplausos del respetable. Supo como conquistar el auditorio, y con las alegrías, que fueron el cante que eligieron algunos de los artistas apagó su voz para dejar paso a los presentadores que amenizaron la noche con sus intervenciones memorando a Chano Lobato y las continuas travesuras que le hacía a Matilde Coral.

Dos voces hay en la actualidad que representan el cante de Cádiz. Una de ellas es la de Carmen de la Jara. La otra Mariana Cornejo. La primera, que tuvo claro que tenía que estar allí esta noche, dedicó unas colombianas, con letra dedicada a Chano, al homenajeado. De su última grabación, en donde se hace un recorrido por los estilos gaditanos, eligió unas bulerías con cantes de tres madres de artistas de Cádiz: Juana Cruz, Rosa la Papera, y María la Sabina.

Rafael Rodríguez / Matilde Coral	El Junco	Matilde Coral

Por otro lado el baile tuvo dos momentos de gran emoción: de un lado, el baile de Juán José Jaén ,”El Junco”, que danzó magistralmente, con la voz en off de Chano y la guitarra de Pedro Sierra por alegrías. De otro, el baile hecho baile: Matilde Coral, que con la voz de Miguel Poveda y la guitarra de Alfredo Lagos y un mantón blanco, lo hizo todo sin nada. Y es que las grandes son así. Un simple movimiento, se hace complejo en la figura de alguien que lo es todo en el baile; como ella misma dijo: “una promesa del baile que debuta en Cádiz a los 74 años”.

Y de vuelta al cante, David Palomar, que está en su mejor momento, acompañado a la guitarra de su inseparable Rafael Rodríguez. Seguiriyas y de nuevo, el encuentro con las alegrías, muy personales, y recorrido por cantiñas, cante de las mirris, etc… Un discreto fin por bulerías con letra propia, que dedicó al maestro dio cuenta del porqué estábamos allí esa noche.

Y mi sorpresa fue la de volver a escuchar en directo a Juan Villar. Con el toque de Niño Jero, hizo soleá y bulerías de Cádiz, muy personales, con clase y mostrando que está en más que buena forma. Como escribía antes, actuó la otra. Otra estandarta del cante femenino. Mariana. Con Eduardo rebollar en la sonanta, atacó el cante por alegrías, y por tanguillos, con sabor a antiguo.

Una de las anécdotas que gustó a los asistentes fue la aparición de Nano de Jerez, que no pudo esconderse tras las bambalinas hasta que le hicieron cantar el tan conocido “bombero” por bulerías.

El fin de fiesta y adiós al emblemático Chano Lobato quiso que el elenco artístico que disfrutó durante toda la noche se enfundara en el cante por tanguillos con una pataíta  de Matilde.

La labor de los tres palmeros, Diego Montoya, Tate Núñez y Perico el de la Chana, durante toda la noche bien mereció unas palmas meritorias para ellos en forma de agradecimiento. Menuda orquesta.

Un más que merecido homenaje al respeto, al cariño y a la sabiduría de quien ha sabido llevar el cante de Cádiz hasta lo más alto. Va por ti, Tío Chano.