Texto: Estela Zatania
Fotos: Ana Palma
XX Festival de Jerez
Viernes, 19 de febrero, 2016. Jerez de la Frontera
Especial XX Festival de Jerez. Toda la información
Y ASÍ PASAN VEINTE AÑOS…
De lujo lo vamos a pasar en el Festival de Jerez este año en su vigésimo aniversario. Después de un pequeño susto institucional administrativo, al final, nadie les va a quitar lo bailao, ni lo que se va a bailar durante muchos años más.
El Festival de Jerez, consolidado como uno de los eventos de danza más importantes del mundo, y el más importante de baile flamenco, celebra los éxitos de dos décadas con un dilatado programa que incluye presentaciones de variado formato en los escenarios habituales, además de una extensa serie de actuaciones de artistas emergentes o locales, jóvenes ansiosos de flamenquear en esta ciudad que se vende como una de las cunas del flamenco. Además del Festival Off en peñas y tabancos, también hay una novedosa serie en celebración del aniversario, XX Espacios XX Artistas XX Festivales, en diversos lugares emblemáticos de la ciudad, exposiciones y proyecciones, los cursillos, las actividades gastronómicas y una feria de muestras relacionada con el flamenco.
EVA YERBABUENA «APARIENCIAS»
Teatro Villamarta, 2100h.
Dirección artística, idea original, coreografía, baile: Eva Yerbabuena. Dirección y composición musical y guitarra: Paco Jarana, Antonio Coronel. Baile: Christián Lozano, David Coria, Fernando Jiménez, Ángel Farina. Cante: José Valencia (artista invitado), Alfredo Tejada. Colaboración especial: Alana Sinkëy. Batería y percusión: Antonio Coronel. Voces en off: Paco Moyano, Manuel Pérez, Manuel Pedraz.
La llegada al Teatro Villamarta para la inauguración del programa del veinte aniversario del evento, tenía cierto aire Hollywoodense: música dramática de cine, focos de colores, imágenes del festival proyectadas al muro de en frente…
Y multitud de personas. Porque Eva Yerbabuena nunca defrauda. En la rueda de prensa del día anterior, ella misma dio las gracias a la organización por haber aceptado su propuesta del estreno de «Apariencias» sin conocer detalles al respecto, así es el nivel de la granadina.
En el programa de mano, la artista declara que con esta obra, «he cerrado un etapa para abrir una nueva». No obstante, el formato de danza contemporánea e imágenes oníricas, rubricado con la legendaria soleá de Eva, sigue vigente. Y funciona. Hay destellos de flamenco, como la bellísima petenera, novedosa en su justa medida, tientos igualmente refrescados y creativos, hermosa iluminación y un hipnótico y bien logrado juego de máscaras.
Siguiriyas y pregón, y el cantaor José Valencia es aplaudido efusivamente. Gran trabajo también del cantaor Alfredo Tejada. Estos dos hombres, con la guitarra impagable del maestro Paco Jarana, mantienen la obra anclada en el flamenco. Una vocalista africana, Alana Sinkëy, adereza los segmentos conceptuales contemporáneos con su dulzura.
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DAVID LAGOS «CLÁSICO PERSONAL»
Sala Compañía, 12 noche
Cante: David Lagos. Artista invitada (baile): Belén Maya. Guitarra: Manolo Franco, Emilio Caracafé. Violin, bajo eléctrico: Salvador Molina. Percusión: Perico Navarro.
David Lagos es un cantaor que no ha tenido que buscar más allá del flamenco para encontrar su inspiración. De hecho, su espectáculo «Clásico Personal» es precisamente eso: un recital de cante clásico a la vez que novedoso, que no es una contradicción. Por ejemplo, ¿cuándo se ha visto un fin de fiesta por marianas? Luego, malagueña de Chacón en lugar de la del Mellizo, que en Jerez se ha convertido en un tópico. Y el remate por abandolao, pero con acompañamiento de panda de verdiales, con violínista y pandero con sombrero de flores, una mezcla alucinante del flamenco con su inspiración folklórica.
Una especie de suite de romances es espectacularmente adornada por el baile de Belén Maya, haciendo incluso de «mora» descalza, dando rienda suelta a sus raíces sacromonteñas. Un romance del Negro del Puerto conduce a la segunda petenera de la noche, y la jota (si, una jota) se trasvasa con naturalidad en alegrías de Cádiz. Es la historia del flamenco plasmada delante de nuestros ojos y oídos.
Soleá de Triana, cante minero, livianas en un tono brillante como cante independiente, fueron otros momentos destacados, todo con credibilidad y solvencia en la voz balsámica de David.
Y Manolo Franco. El gran guitarrista al que vemos demasiado poco en los escenarios, mucho menos tocando para cante. Es el eslabón entre la época antes de Paco, y la guitarra galáctica del 2016. Su música se entiende a la primera, sin ser anticuada en lo más mínimo, y su impecable buen gusto impide que abuse de los acordes extendidos y otros juguetes. El guitarrista bohemio, Caracafé, aporta dimensión, además de deleitarnos con su baile.
Luego dicen que Jerez no es más que sota, caballo y rey. Parece que nadie se lo dijo a este cantaor creativo y sin complejos. Ni un lugar común.
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