1º Ciclo de Flamenco Contemporáneo. Del 22 al 25 de octubre de 2019. Murcia
«Lo que es y lo que debe ser el flamenco»
Cuatro días intensos de encuentro entre autores y aficionados, profesores y alumnos en busca del Santo Grial, ese concepto que aclare o disipe las dudas entre el pasado y el presente, o cómo ser fiel a la tradición en nuestro días sin alterar la ortodoxia; el recuerdo del pasado que se mantiene vivo en la memoria, y sin memoria no hay recuerdos como explican la bailaora y coreógrafa Leonor Leal, y el insólito autor Francisco Contreras “Niño de Elche”. Y sobre la base del recuerdo construimos la realidad, el hoy, en base a unos recuerdos que cada vez aceptamos como reales sin percatarnos en que nos basamos en el recuerdo más anterior, el más cercano, y sobre él realizamos nuestro proyecto. La percepción, tanto en la lengua -lo vocal- como en lo físico, tiende a aceptar unos patrones imaginarios que traslada esa simbología a nuestro cerebro creando una realidad paralela.
Así, los ejemplos de ver sin voz o escuchar sin ver, esto es ver al Agujetas entonando sin oírle o escuchar una grabación de Antonia Mercé marcando compás con su zapateao y palillos acompañada de una melodía al piano. Son ejemplos propuestos por ambos creadores en sus respectivas conferencias, «La voz en el flamenco» del Niño de Elche, y «El lenguaje de las líneas» de Leonor Leal. Al Agujetas nos lo imaginamos entonando Martinete en el vídeo que nos propone el primero, pues sus gestos muestran esos detalles propios del cante primario, al igual que con el compás de «La Argentina» en la grabación que nos pone Leonor, a la que nos imaginamos bailando con traje bolero por Alegrías o Tangos: la memoria nos devuelve el recuerdo, la «imagen superviviente» que denomina la bailaora. Y cita al japonés Kazuo Oono -fundador de la Escuela Buto de Japón- por poner un ejemplo, que décadas después de ver su espectáculo en Tokio en 1929 rememoró el Arte de la bailaora en un espectáculo en Barcelona en 1982.
¿Cómo construimos sobre lo realizado?; ¿Qué patrones utilizamos para rememorar lo auténtico? La pureza en el flamenco no existe, asevera la bailaora Olga Pericet: «el flamenco es impuro; el sentido está en la Verdad y en el conocimiento de lo que se hace.». Y añade que el flamenco actual se basa en la libertad de creación teniendo como base lo ortodoxo, dígase la danza española o el folclore porque «todo es contemporáneo porque es de ahora», y cita a Rosalía, ese aire fresco referencia para las nuevas generaciones, una puerta abierta para seguir en la investigación de nuevos rumbos para el Arte. Un Arte que vino también de África, que se mezcló con ritmos tribales hispanos o caribeños y que se entremezclaron y fundieron en un estilo único, sorprendente, en esos cantes gitanos que mutaron en flamenco gracias a las aportaciones de culturas diversas, o así nos lo cuenta el instrumentista e inventor del Tres Flamenco Raúl Rodríguez en su charla «AntropoMúsica de Ida y Vuelta«, un paseo rítmico vocal por las orillas del Atlántico a través de los siglos.
Sin lugar a dudas, un encuentro de creadores interesante y revelador de la otra mirada, algo más allá de la Santísima Trinidad -el cante, el baile y el toque- , como la define Niño de Elche; la mirada inconsciente o la escucha atenta que revela un sentimiento o un recuerdo sin tener más datos físicos, propuestas de creadores de hoy, hombres y mujeres abiertos a tendencias basadas en la sociología o la filosofía, de preguntas que todavía no tienen respuesta pero preguntas al fin y al cabo que más tarde o temprano encontrarán su respuesta.
Otra de las conferencias del Ciclo fue la denominada «La vanguardia en la historia del flamenco«, un repaso por los grandes nombres del Arte que rompieron esquemas en la ortodoxia flamenca a cargo del profesor de la Facultad de Comunicación de Murcia y documentalista flamenco Onésimo Hernández. Así, el profesor nos mostró el primer documento cinematográfico de danza española que protagonizó Carmen Dauset «Carmencita» frente a las cámaras de Edison en marzo de 1894, nos habló de Don Antonio Chacón o de Silverio Franconetti, del saxofonista Negro Aquilino, del gran Vicente Escudero, Pepe Marchena o Paco de Lucía… Aquellos artistas inquietos que traspasaron umbrales para investigar nuevos desafíos, otros caminos por los que continuar con el legado adquirido tras el conocimiento reglado.
Momento de interés fue la reunión de los directivos de las peñas flamencas de la región. En la mesa se sentaron, de izda. a dcha., Ángel Ronda, de la peña Antonio Piñana de Cartagena; Diego Torres, de la Asociación Flamenco y Copla El Arte de San Javier; Frank Béjar, de Murcia Flamenca, de Murcia; José Antonio Oliva, de la Cueva Flamenca de Lorquí; Onésimo Hernández, de El Malakate Flamenco de La Unión; Mariano Escudero, de la peña Melón de Oro de Lo Ferro (Torre Pacheco); y Cayetano Padilla y Luis Terry (presentador de las galas del Festival Internacional de Cante de Lo Ferro), de la peña Ciudad del Sol de Lorca, un debate entre los componentes de la mesa a la hora de evaluar el estado del flamenco en las ciudades murcianas; la peña como refugio natural de socios y aficionados, sus programaciones y actividades en el desarrollo del conocimiento popular flamenco.
También hubo espacio para la creación, la prueba física de los nuevos conceptos físicos flamencos. El grupo de flamenco-jazz «Chancho Proyecto» ofreció unos temas en directo de su interpretación actual de la música de fusión, la Compañía de Danza de la Universidad Católica de San Antonio UCAM puso en escena unos cuadros de su obra «Mutable«, el baile urbano del bailaor Daniel Hernández que realizó su performance, «Back Again» en el hall de la sala, la exposición fotográfica de Onésimo Hernández titulada «Tientos tantos«, o la instalación artística del artista plástico Michi Currigan “Montaña de Fuego. Instalación #1”.
La bailaora, coreógrafa y empresaria Eva la Yerbabuena, la cantaora Rocío Márquez y el director del Ballet Nacional de España Rubén Olmo enviaron unos vídeos personales en los que explicaban su proceso creativo y la problemática actual de vivir de la profesión, la complicada situación de algunos creadores a la hora de poder mostrar sus proyectos en salas y teatros.
Cuatro días intensos en los que el iniciado o aficionado, alumno o curioso ha podido aprender un poco más acerca de la modernidad, el hoy ante el ayer que conforma este grupo de artistas reacios a repetir unos dogmas dados, a perpetuar los códigos manidos tras años de vigencia y que buscan alternativas paralelas a un Arte que hoy sigue más vivo que ayer.
Gracias a Jessica Cerón, coordinadora del Ciclo, y a Onésimo Hernández por su asistencia y colaboración con este aficionado.
Foto portada: “La bailaora, coreógrafa y empresaria Olga Pericet, junto a Jessica Cerón, en el desarrollo de su charla” Foto: jch
José L. Ramos Romero