Texto: Estela Zatania
Fotos: Ana Palma
22 FESTIVAL DE JEREZ
Belén López «Flamenca»
Lunes, 26 de febrero, 2018. 24h. Sala la Compañía, Jerez de la Frontera
Especial 22 Festival de Jerez – Toda la información
“FLAMENCA”. Baile: Belén López. Cante: Manuel Tañé, Morenito de Íllora y Pedro Jiménez. Guitarra: Juan Jiménez y Carlos Jiménez. Percusión: Rafael Jiménez 'Chispa'
Hay que admirar a los bailaores que creen tanto en su arte y en este género, que se arriesgan a exponerse en un escenario desprovistos de guion o hilo argumental. Es un “aquí estoy yo” pelado y valiente que, si antes era la norma, hoy no todos quieren asumir, aunque muchas veces son los mismos programadores que exigen el envoltorio de una historia o motivo para atraer al público no iniciado. Con razón los turistas extranjeros a veces me preguntan “¿qué historia cuentan las manos de la bailaora?” (La respuesta corta para los que se lo están preguntando es: ninguna).
Belén López, catalana como la más famosa bailaora de todos los tiempos, Carmen Amaya, se presenta así, con su fuerza y su creatividad. Su baile. Y si hay alguna historia, es la abstracción de su vida y biografía, su larga trayectoria desde la niñez. Estuve trabajando en Tarragona en los años noventa cuando salió una niña chiquitita bailando por la televisión local. En seguida sabía que Belencita no era la típica criatura que había dado muchas clases y aprendido a hacer muecas a compás para el deleite de sus mayores. No. Hubo más. Veías una intensidad, la promesa auténtica de una futura figura que llegaría a comerse los escenarios. En el 2004, estuve presente cuando ganó el Premio Nacional de Flamenco «Mario Maya» del Concurso Nacional de Córdoba, y anoche, en el Festival de Jerez, tras otros muchos premios y reconocimientos, puso su verdad flamenca a la disposición del público que llenó la Sala la Compañía.
Los años de experiencia en tablao le han hecho conocedora del público, de cómo agradar, emocionar o provocar aplausos. Y no sé si es ventaja o defecto: probablemente un poco de ambas cosas. El flamenco es un género que mejor se entrega habiéndolo pasado por “el ministerio del interior” como diría Fernando de la Morena. Belén es un portento, no cabe duda, pero – y sé que suena raro – me gustaría verla más vulnerable, menos segura de sí.
En “Flamenca”, la bailaora demuestra su dominio de la bata de cola, palillos y mantón, además de una formación clásica que ostenta a través de unos movimientos de ballet clásico bien aprendidos, que sabe incorporar al flamenco. Por soleá, taconea con fuerza durante el cante, de modo que apenas se escucha la voz. Por el lado positivo, exhibe abundancia de pellizcos sabrosos y originales, especialmente por bulerías. Hermosa estampa por alegrías con bata de cola blanca, y un estilo angular y recortaíto. Por taranto sigue con su línea agresiva a la vez que femenina, así rematando un programa fuerte que pocos serían capaces de entregar.
Unas horas antes, a las siete de la tarde, en la Sala Paúl, Diego Villegas de Sanlúcar de Barrameda, gran dominador de los instrumentos de viento, presentó su grabación “Bajo de Guía” con el apoyo de la guitarra de David Caro y la percusión de Roberto Jaén. De artista invitada, la bailaora María Moreno puso su luminosa visión gaditana del baile con pellizcos a la antigua que tan bien ejecuta.
