Texto: Estela Zatania
Fotos: Ana Palma
Antonio Molina «El Choro» «Aviso: Bayles de Jitanos»
Sábado, 20 de febrero, 2016.
Sala Paúl – XX Festival de Jerez
Especial XX Festival de Jerez – Toda la información
ANTONIO MOLINA 'EL CHORO', «AVISO: BAYLES DE JITANOS»
Sala Paúl, 1900h
Baile, dirección coreografía: Antonio Molina 'El Choro', Gema Moneo. Guitarra: Jesús Guerrero, Juan Campallo. Cante: Pepe de Pura, Jesús Corbacho, Moi de Morón. Percusión: Paco Vega. Dirección artística, idea original, coreografía, guión, repertorio, concepción musical, fotografía, textos: Rafael Estévez. Ayudante de dirección y coreografía: Valeriano Paños.
Acontecimiento inesperadamente importante en la Sala Paúl a las siete de la tarde. Hace años vi bailar a Antonio Molina «El Choro», y me pareció un joven extraordinario. Pero luego quedó como atascado en papeles menores que no le dejaban demostrar su capacidad. Anoche la promesa se cumplió. El Choro, logró exponer su brillante talento, flamencura e intensa personalidad y fuerza, no sólo física, sino interpretativa y psíquica. Es una línea clásica/moderna inspirada en el farruquismo, sin caer en la imitación. Hay hambre de este tipo de flamenco, como quedó demostrado por la reacción del público. Ni siquiera la explosiva bailaora Gema Moneo pudo restar protagonismo al bailaor, aunque lo cierto es que hacen buena pareja artística.
El título de la obra, «Aviso: Bayles de Jitanos», procede de un famoso cartel de 1781, y sirve de orientación y guiño. No hay ánimo alguno de reproducir bailes históricos, sino de destacar el carácter polifacético del flamenco actual, y su procedencia multicultural. Se nota la mano del brillante Rafael Estévez que figura como director artístico, coreógrafo y guionista entre otras cosas.
Las guitarras de Jesús Guerrero y Juan Campallo, originales y creativas. Bulerías abundantes y chispeantes, y destacable el martinete que baila el Choro a compás libre con el cante de Pepe de Pura. Gema Moneo interpreta una danza mora, forma que vuelve a circular después de décadas de desuso, y canta la zambra de La Tana que dejó grabada Carmen Amaya: gitanería sin miramientos. Tangos de Granada y jaleos demuestran la comunicación entre Granada y Extremadura. Brillante debut de compañía.
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