Hora: Martes, miércoles y jueves a las 21 h. Viernes a las 22 h. Sábados a las 19 y a las 22 h. Domingos a las 19 h. Precio: De 20 a 39 euros. Venta de entradas: En taquilla, en Servicaixa (902 10 12 12) y en topticketline.es (902 888 788). Desde 08/02/2007 a 18/03/2007
BAILE: Farru, Jose Maya, Barullo. Artista invitado: Van the Man Porter, CANTE: Antonio Zúñiga, Simón de Málaga, Pedro el Granaino, El Rubio de Pruna, Maria Vizárraga, Ángela Bautista, Teresa Bautista, TOQUE: David Cerreduela, Miguel Iglesias, Antonio Rey, PERCUSIÓN: Luqui, El Bandolero, Juan Carmona.
Texto: Sonia Martínez Pariente
“Al Natural” es el nuevo espectáculo que protagonizan los Farruco: Farru y su primo Barullo, esta vez bajo la producción de Pino Sagliocco. Ambos inician una nueva andadura sin Farruquito, que llevaba la batuta en los montajes de la familia. En está ocasión es José Maya, cuyo concepto del baile va en la misma línea de los otros dos bailaores, el que comparte protagonismo con ellos.
El estreno fue a lo grande, destinado a familiares, amigos, prensa y rostros conocidos que siempre contribuyena promocionar un nuevo proyecto.
“Al Natural” está rodeado de una estética que potencia la iluminación y algún efecto, como la niebla, un vestuario más juvenil. Detalles que ya se han incorporado en otros espectáculos flamencos y que le dan un toque de musical a lo Broadway. Contrasta con la anterior estética que rodeaba los proyectos de estos bailaores, concretamente los de la saga de los Farruco, que poseían un punto muy personal – algo que se echa de menos. Pero si este nuevo aire ayuda a acercar el baile de estos artistas, más al gran público y a venderlo internacionalmente, pues bienvenido sea.
Un toque de musical a lo Broadway
Aunque realmente lo más importante es la esencia del espectáculo: tres bailaores con su propio baile, que es donde está la raíz y la modernidad del flamenco. Aunque el espectáculo es una sucesión de estilos sin más, en las creaciones de cada artista es donde reside su atractivo.
José Maya, Farru y Barullo abren por seguiriyas. El baile racial, cargado de fuerza es claramente su carta de presentación.
Los músicos hacen un solo por tangos. Arroparon muy bien a los bailaores y cuando cobraron protagonismo, como posteriormente en unos fandangos, dejaron clara su calidad.
Farru y Barullo hacen un dúo por alegrías. Bailando juntos se encuentran cómodos, sus bailes se funden de manera natural. Se van pasando el testigo el uno al otro, crean movimientos espectaculares, subaile es de casta.
José Maya interpreta soleá por bulerías. Crea un baile apasionado, valiente, con desplantes, y quiebros de intensa flamencura. Es un baile de habilidad, de técnica y de pureza. Cuando la cantaora María Vizárraga se acerca al bailaor para cantarle, se aprecianmomentos cautivadores, desgarrados, dándose de lleno, cargados de intensidad. Conjuga con perfección, en suestilizada figura, todos los aspectos del baile: brazos, pies, torso, cabeza, con gran derroche de temperamento.
Aluvión de pies, derroche de fuerza y sus pellizquitos
Barullo baila por soleá con mucho empaque. Al principio contenido, marcando los pasos, el braceo. Da entrada a su poderoso zapateado, los saltos típicos de la saga, se muestra flamenquísimo en sus dejadas. Otra vez aluvión de pies, derroche de fuerza y sus pellizquitos. Su actuación va creciendo hasta que llega a un momento cargado de jondura,cuando se quita las botas con chulería y baila descalzo, una pincelada de distinción. Se acerca al espejo que hay en la escena y deja las botas, sólo sus gestos son arte.
Contraste total con la salida del tapdance con Van The Man Porter, aunque son claras las semejanzas del claqué con el flamenco, sobre todo en el uso de los pies. Es como si por el barrio de Santa Cruz, presente durante toda la función en el decorado, se paseara un bailarín del Bronx, bailando claqué por tangos. Porter hace un baile desenfadado, divertido, interactivo.
Pero es más acorde con el montaje y hay una mayor integración de los dos artes en la pieza “Encuentros”, con la salida al escenario de José Maya, que con traje rojo, volvió a deleitar, ofreciendo más todavía de lo que puede dar de sí su baile por derecho.
Entre el madrileño y el afroamericano hay un dialogo de pies, posturas, gestos, giros…compitiendo, desafiándose con chulería. Una fusión y convivencia de ritmos que resultó de lo más atractiva.
Farru sale subido en tarima para dar rienda suelta a un despliegue de pies y giros. Ya en el suelo disfrutamos de subaile por tarantos. Primero: elegante, pausado. Después su trepidante zapateado y sus piruetas, que ejecuta con precisión extrema. Y para rematar, nos va deleitando con esa faceta que nos quedaba por ver: laroneante, chulesca, seductora, creando una estampa flamenquísima. Juega con su cuerpo, con el pelo, bastante, derrochagracia al ponerse y quitarse chaleco, en los contoneos, en sus paseos.
Para el final, sincronización perfecta de los tres, baile flamenco masculino en estado puro.
No faltó la fiesta por bulerías donde fueron saliendo algunos miembros del grupo, y hasta Pino Sagliocco se marcó supataíta.
