El guitarrista Vicente Amigo acude mañana viernes 12 de mayo a una cita muy esperada por el público de Córdoba: la presentación en el Gran Teatro de su último trabajo, Un momento en el sonido, disco con el que el genial artista vuelve tras cinco años sin publicar en solitario y que él mismo define como «una obra de clímax». «Trato –afirma- de dar un mensaje nuevo y de mantener lo que siempre he sido. Es un álbum muy serio, muy flamenco».
Con todas las localidades agotadas desde hace semanas, el guitarrista
comparece en su ciudad de adopción acompañado por José
Manuel Hierro (segunda guitarra), Blas Córdoba (voz), Patricio
Cámara (voz y percusión), Antonio Ramos Maca (bajo), José
María Sánchez Cortina (teclados) y Paquito (percusión).
El concierto, que dará comienzo a las nueve de la noche, se enmarca
en las actividades programadas en el Año del Flamenco con motivo
del cincuenta aniversario del Concurso Nacional de Arte Flamenco de Córdoba.
Un momento en el sonido es el quinto disco en solitario de Vicente Amigo.
Su anterior trabajo, Ciudad de las Ideas salió a la venta en 2000
y le valió a su autor el premio Grammy como mejor disco flamenco.
Con posterioridad, grabó Canto junto a El Pele y colaboró
con Sting en Sacred Love. Como explicó en su día el artista
“han sido cinco años en los que no he parado con las giras
y otros discos. Pero ahora quiero dedicar más tiempo a mi trabajo
solo”.
El nuevo trabajo mantiene la fidelidad a la línea creativa iniciada
por Amigo desde su primer álbum: innovadora, brillante, inteligente…
, no en vano de su obra se ha dicho que es “flamenco del siglo XXI”.
Y esta acusada personalidad flamenca y, a la vez, muy moderna, está
presente en todos los temas incluidos en el disco: bulerías, soleá
–un palo que, una vez más, dedica a Córdoba bajo el
título Mezquita-, farruca, taranta, tangos, zapateado y bolero.
A sus 38 años, Amigo continúa siendo sin lugar a dudas
el más virtuoso y destacado intérprete de su generación
y un incansable investigador de las enormes posibilidades estéticas
y sonoras del flamenco. “Las músicas –explica- se mueven
por unos campos inabarcables y todas pueden ser hermanadas con respeto,
rigor y conocimiento. Yo parto del flamenco y me gusta acercarlo a otras
manifestaciones musicales para hallar la emoción, aunque siempre
procuro no desvirtuar a ninguna de ellas”.
