«El resultado de muchos meses de trabajo ha sido un espectáculo multimedia en el que el ritmo y la narración no decaen en ningún momento de la actuación». Con estas palabras ha definido hoy en rueda de prensa el montaje Inmigración su propio director y guionista, Fernando González-Caballos. La obra, que supone la presentación a nivel nacional de la Compañía de Ángeles Gabaldón, se presenta mañana miércoles a las 21.00 en el Teatro Central.
José
Carlos Morales, director de Taller Flamenco (que corre a cargo de la producción)
hizo hincapié en el hecho de que Inmigración pueda verse
simultáneamente por Internet desde la misma hora del estreno, lo
cual ha sido posible gracias a un acuerdo de colaboración suscrito
con www.flamenco-world.com.
De otro lado, Morales agradeció el apoyo prestado por todas las
administraciones competentes, y adelantó que la compañía
ya tiene varias galas cerradas, «principalmente fuera de España».
Fernando González-Caballos tomó la palabra para recordar
cómo comenzó a proyectar este espectáculo tras leer
el libro de Juan José Téllez Moros en la costa. «Intenté
acercarme a la obra desde un punto de vista antropológico, y el
resultado ha sido un espectáculo flamenco que se abre a todas las
músicas del mundo», afirmó González-Caballos.
Por su parte, Juan José Téllez aseguró que la originalidad
de este espectáculo, en el que «las imágenes audiovisuales
ayudan en gran medida a lo que se está narrando», radica
en que se trata «de un proyecto de teatro político presentado
en un lenguaje muy inusual». «la estética
y la ética –prosiguió- se sitúan en un mismo
plano, y se realiza una importante apuesta diacrónica en la que
se enlaza y relaciona a los inmigrantes de ahora con los de antes».
Finalmente, Téllez definió Inmigración como un «montaje
absolutamente promiscuo desde el punto de vista artístico».
El director escénico de la obra, Fernando Lima, quiso dejar patente
que, desde el principio, «lo más importante ha sido el
grado de implicación de todo el equipo», en el que se
encuentran artistas de nacionalidades tan dispares como Francia, Inglaterra,
Brasil, Marruecos, Canadá y Japón. «Otra de las
cosas importantes de Inmigración, desde mi punto de vista, es que
genera emociones sinceras, y no cae en el error de frivolizar con un tema
tan duro como éste», apostilló.
La propia bailaora del espectáculo, Ángeles Gabaldón,
fue la última en tomar la palabra para dar las gracias a todos
y cada uno de los que han colaborado y trabajado en un montaje que, para
ella, «trata el tema de la Inmigración desde un solo
punto de vista, que no es ni mejor ni peor, es el nuestro».
La artista finalizó afirmando que se siente feliz porque mañana
debutará en el Teatro Central con un espectáculo «del
que me siento muy orgullosa»