José Manuel Gómez – Gufi
Fotos: Rafael Manjavacas / Paco Manzano
Este viernes se ha presentado a la prensa el Libro-Catálogo «Universo Morente» creación y vida de Enrique Morente.
Morente para rato.
Un rumor de abrazos, besos y palmadas en la espalda acompañó la presentación en Madrid de “Universo Morente” monumental catálogo de la exposición que con el subtítulo “creación y vida de Enrique Morente” se celebra en el Palacio Carlos V de Granada hasta 1 de marzo del 2015.
Había muchos amigos de Enrique “el inventor de la redes sociales antes de internet” en palabras de Juan Verdú. Sobre el tablao de El Corral de la Morería estaban Aurora Carbonell, Amaranta Ariño, Pedro G. Romero, José Luis Ortiz Nuevo, José Manuel Gamboa, Miguel Mora, Balbino Gutierrez y la anfitriona Blanca del Rey.
Se dijeron cosas cruciales sobre Enrique y su actitud vanguardista. Pedro G: Romero señaló que hay mucho Morente más allá del Omega, por ejemplo en su Misa Flamenca, la obra de un ateo. Gamboa se centró en su producción discográfica “que siempre quiso volver a grabar, dudaba de todos sus discos”.
Aurora hablo de su marido de manera contundente: «Viví con él 35 años, y era un genio en todo. Desde la forma de comer a cómo miraba La Alhambra. Desde que se fue ya no me sorprende nadie. Dejó una puerta abierta y no ha habido una pizca de movimiento. La creación se fue con él, y lo digo delante de tres Morentes».
Y ahí los análisis dieron paso al cante. Antonio Carbonell interpretó “El pequeño reloj” y luego salieron Estrella, Soleá y José Enrique acompañados por Montoyita y bailó Blanca del Rey.
EL LIBRO
La minuciosa documentación sobre Morente está cuidadosamente organizada en temas, Ortiz Nuevo escribe sobre su faceta de cantor de coplas. Su biógrafo, Balbino Gutiérrez, organiza su trayectoria año a año. Ahí es donde se ve la grandeza de la exposición. Con un rosario de imágenes y documentos extraordinarios. Impagable la entrevista de Francisco Almazán a Enrique en la revista Triunfo en el año 1970 en que ya aparece el término “flamencólico” y en la que se percibe a un Enrique peleón ante su amigo que le pregunta cosas como “¿No crees que estás traicionando a los maestros?”. Paco Almazán fue el compañero que acercó a Enrique a los colegios y universidades.
La parte gráfica contiene obras de Picasso, Lorca o Miguel Barceló (por citar a alguien) pero donde muestra el verdadero carácter escurridizo de Morente es en la fotos de Paco Manzano que ilustran episodios que merecerían capítulos aparte.
Morente inédito
Cuenta Aurora Carbonell en el libro que Enrique era capaz de invitar a su boda a un mendigo que encontró en la calle. No eran gestos para la galería, Enrique sabía reconocer en los excluidos el valor del fracaso. En otra parte del libro Enrique señala cómo le influyó actuar en la sala Revolver. La sala de conciertos madrileña instauró en 1994 los lunes flamencos. Santiago Camuñas fue el principal inductor que reconoce “que los lunes flamencos no hubieran sido posible sin Enrique” y en otro lugar se señala que cuando Enrique había tenido un reconocimiento y le inundaban los halagos enseguida le pedía a Santi que le programara un concierto en el Revolver. Era su forma de ponerse las pilas. Ahí acuñamos una expresión: “A Morente le suben las chupas de cuero”. Lo que no cuenta el libro es el poder transformador de esos conciertos de Morente entre la grey rockista.
Hay otros momentos de Enrique que permanecen inéditos. En una barra del Corral de la Morería, Julio Muñoz (Festimad) rememoraba un episodio ocurrido en los años 70 cuando formaba parte del grupo Desmadre 75, que tocaban en un tugurio en el que las estrellas eran: su grupo, Enrique Morente y una striper. Problablemente ahí nació el interés de Enrique por la técnica del collage y sus primeras colaboraciones con José Antonio Galicia y el jazz. Especialmente la celebrada en 1985 en el teatro Pavón en un espectáculo titulado “Recuerdo de Carmen Amaya” (de nuevo inmortalizada por Manzano). La grabación de su concierto con Max Roach, la Barbería y Raimundo Amador es otra de las obras que permanecen inéditas. Chema García Martínez recuerda sus reuniones con Morente para preparar “algo fuerte” con el jazz. Pero quizá donde abundan “los morentes” inéditos sea en la memoria de sus amigos, miles, según todos los indicios, que recuerdan la sonrisa del cantaor despidiéndose en la madrugada.
Hay Morente para rato.
Universo Morente – Catálogo
Universo Morente – Catálogo
Loops Enrique Morente by Paco Manzano