1912-2008
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Cuando se mueren estas personas famosas tan mayores, es la costumbre decir “el final de una época”. El en caso de Pilar López, se podría hablar de la clausura de varias épocas, porque doña Pilar López Julver vio y participó en una larga y paulatina revolución en el baile flamenco y español que abarcó desde el final de la época del café cantante, los comienzos de Vicente Escudero, o su propia hermana Encarnación, la legendaria Argentinita, hasta ayer mismo cuando falleció a la edad de 95 años.
También conoció a la Macarrona, la Malena, Pastora Imperio, Carmen Amaya y tantas otras figuras de su larga vida. No sería exagerado decir que a partir de la influencia de su genial hermana, diseñó el baile flamenco para teatro. Vivencias tan extensas dan para muchos datos y fechas, pero lo más destacable de doña Pilar siempre ha sido las grandes figuras de bailaor o bailarín que salieron de su compañía con importantes lecciones aprendidas y asimiladas, para marcar caminos nuevos que nunca se apartarían mucho de la estética de Pilar López. Los nombres más notables de este grupo privilegiado son Antonio Gades, Mario Maya y El Güito, pero también eran figuras importantes José Greco, Alejandro Vega, Manolo Vargas y Roberto Ximénez, cada uno exhibiendo esa elegancia y sobriedad que Pilar supo infundirles. Durante tres décadas, Pilar López viajó por los mejores teatros del mundo entero con su compañía fundada en 1946, estableciendo un repertorio mixto de danza española y flamenco que sería el ejemplo a seguir para un sinfín de artistas y formaciones de toda clase. Muchas de sus coreografías han perdurado como clásicas, hasta en el flamenco, más notablemente su versión bailada de la caña que está incluida en la película Duende y Misterio del Flamenco, de Edgar Neville, donde Alejandro Vega es su elegante pareja, una estampa para la historia. Pilar López no marcó sólo una época, sino el siglo veinte, y su ausencia es lamentada por toda la afición. CONDECORACIONES Y DISTINCIONES |
