En un ensayo abierto a los medios de comunicación, ambos Premios Nacionales de Danza han ofrecido detalles sobre este espectáculo con el que la bailaora, bajo, la dirección de Galván, busca «eliminar todos sus miedos».
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Los Premios Nacionales de Danza Isabel Bayón e Israel Galván, han ofrecido un ensayo abierto del espectáculo ‘Dju-Dju’. A la performance, que ha contado con la participación de las bailaoras Alicia Márquez y Nieves Casablanca, y el músico Alejandro Rojas- Marcos, también han asistido la directora general de Cultura, Isabel Ojeda; el director de la Bienal de Flamenco, Cristóbal Ortega; y el artista Pedro G. Romero, que también ha colaborado en este montaje dirigido por Israel Galván para Isabel Bayón creado expresamente para la Bienal de Flamenco de Sevilla.
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En este encuentro ante los medios se han ofrecido detalles sobre el proceso de creación de “Dju-Dju”, un espectáculo que se presentará en primicia ante el público de la Bienal el próximo 26 de septiembre en el Teatro de la Maestranza de Sevilla.
Considerando el propio proceso de creación como una parte fundamental del hecho artístico, los asistentes han podido conocer, de la mano de Bayón y Galván algunos aspectos de esta experiencia conjunta entre dos grandes talentos de la danza que comparten generación y trayectoria vital. Uno al baile y otro en la dirección, han trabajado con sus manías, sus supersticiones y sus miedos para crear “una obra humana, en la que se rompe con el baile académico y se incorporan elementos que transforman el gesto, enrarecen el baile y enferman la expresión artística creando algo nuevo e interesante”, ha dicho Galván.
Para Bayón, enfrentarse a sus propios fantasmas la ha llevado mucho más lejos artísticamente de lo que ha ido nunca. “He incorporado al montaje mis manías y temores del día a día, he tocado sitios que nunca toco aunque estén en mí. Israel ha sabido llegar hasta ellos. El público va a ver una Isabel Bayón irreconocible, pero, al mismo tiempo, seguiré siendo yo”, ha manifestado.
En ‘Dju-Dju’ el proceso de investigación está resultando tanto o más importante que el espectáculo en sí. “Galván y Bayón han desarrollado un recorrido biográfico hacia los orígenes de los miedos, usando materiales procedentes del expresionismo, así como ejemplos cultos del matrimonio primigenio entre el imaginario flamenco y la superstición, como ‘La Danza del terror” de “El Amor Brujo” de Falla, creando un espectáculo de terror en el que el miedo produce movimiento en lugar de parálisis” ha comentado Pedro G. Romero, que ha asesorado en la dirección de Israel Galván. En este sentido, se trata de “un montaje colectivo de baile flamenco con elementos propios de la danza contemporánea, donde Israel Galván propone una nueva forma de trabajar, un espectáculo dirigido por él sin tratar de promover su propio repertorio coreográfico, sin que su presencia sea obvia”.
En cuanto al propio montaje, fue la propia Isabel la que tras el trabajo realizado en “Lo Real” contactó con Israel para a partir de “esa idea de liberar los miedos” construir el que será su nuevo montaje. Bayón y Galván comenzaron a trabajar sobre esta idea “partiendo de coreografías desechadas en Lo Real, y de la magia que surge cuando Isabel Bayón, Alicia Márquez y Nieves Casablanca, las tres intérpretes de ‘Dju-Dju’, se ponen a bailar. “Son tres hadas madrinas, son amigas de la infancia, son cómplices y se comunican sin hablar. Su conexión es total y natural”, ha concluido Galván.
Para Cristóbal Ortega, director de la Bienal, “el espectáculo Dju Dju va a ser una de esas producciones que no va a dejar indiferente a nadie, es un auténtico privilegio que Isabel e Israel se unan para esta creación, siendo la primera vez que Galván dirige un espectáculo para otra bailaora. Esta creación conjunta es una muestra de lo que va a suceder en esos 25 días de Bienal donde vamos a vivir experiencias únicas. Isabel e Israel son un ejemplo de la inquietud del flamenco por experimentar, pero siempre desde el respecto. Disfrutar de estos dos Premios Nacionales de Danza de manera tan directa el día 26 de septiembre en el Teatro de la Maestranza es un auténtico privilegio”.
