DÍA TRISTE PARA EL FLAMENCO

El mundo flamenco está consternado ante la detención de una de las figuras más significativas del gremio.

No
entraremos en detalles porque para eso hay medios especializados. Tampoco
hay ánimo de defender ni condenar. Juan Manuel Fernández Montoya
«Farruquito», hijo del cantaor Juan Fernández Flores, El
Moreno, y de la bailaora Rosario Montoya Manzano, La Farruca, es el joven
patriarca de la dinastía de los Farrucos, una familia que ha sufrido
su ración de desgracias y ahora vuelve a pasar por otro trance difícil.
El niño de doce años que bailó con su mítico
abuelo Farruco en la película Flamenco de Carlos Saura, ha realizado
una trayectoria imparable hasta ahora. Con quince años montó
su primer espectáculo y desde entonces no ha dejado de sorprender
a públicos nacionales y extranjeros con su sabia mezcla de tradición
y creatividad teñida siempre de una sensibilidad artística
y flamenca. Siente auténtica adoración por su desaparecido
abuelo Farruco, abanderado espiritual de la familia cuya presencia es evocada
en la obra más reciente, Alma Vieja, donde se alude en baile a la
ascendencia de los Farrucos.

El hermano menor, Farruco, casi iguala al mayor en el baile, y al menos
tres más pequeños que se están formando en la misma
línea ya toman parte en las actuaciones. En el Festival de Jerez
la prensa especializada citó la obra Alma Vieja como una de las
representaciones más logradas de la dilatada festival que tuvo
lugar a primeros de marzo.

El mundo flamenco espera ansiosamente para conocer el desenlace de esta
nueva situación preocupante y Deflamenco quiere expresar su solidaridad
con todos los afectados.

La redacción

 
 

 

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