Josema Polo. Revista El OLIVO.
Decisión es el primer disco de guitarra solista que publica Pedro Sierra. Un guitarrista de experiencia, pues largo es el camino que lleva andado pese a su juventud. Con algunos puntos clave. Entre ellos, su colaboración como segunda guitarra junto a Paco Cortés en el disco La luna en el río de Carmen Linares, el trabajo que la consagró artísticamente.
Con más de diez años de tregua, pedro Sierra revisa en su nuevo disco algunas de aquellas falsetas que complementaban el cante de Carmen, demostrando pasado el tiempo, que una parte en el mérito de aquel trabajo debe corresponder también a un guitarrista prácticamente desconocido por entonces que firmaba junto a Paco Cortés en las guitarras del disco. Desde aquello, carrera de sacrificio entre directos por medio mundo y sesiones de estudio para multitud de artistas, flamencos o no. Y más recientes en el tiempo, rezan en su historial la producción y guitarras en el debut discográfico de su mujer, la cantaora Juana Salazar La Tobala, y hasta un disco con versiones para guitarra de éxitos pop, intento comercial de escasa repercusión que anecdóticamente precede al salto de concertista flamenco que Pedro Sierra inicia en este disco, titulado Decisión por indicios obvios.
Azul añil es su primer corte, rumba prestada a la improvisación de los músicos en un paseo rítmico desde la rumba caribeña al contratiempo brasileño o la sesión jazz. Similar apuesta jazzística mantiene en Calles Estrechas, juego ternario entre su guitarra y el piano de Jesús Lavilla. Será en la bulería Saragata donde Pedro Sierra nos muestre las primeras trazas de su lado más flamenco, desarrollando contratiempos sorprendentes en una melodía muy cuidada cargada de acentos con intención.
Tangos con la voz y soniquete de José Luis Figuereo El Barrio, que deja sello personal. Y de nuevo Pedro Sierra al abordaje rítmico: Taberna del Puerto, alegrías de exquisito gusto melódico distribuido en asombrosa demostración de soltura rítmica.
El tema Violeta de suave olor esconde unos tangos de fraseo sencillo. Pero sólo aparentemente; a veces la sencillez es la más difícil de las metas, queda demostrado aquí.
En la bulería Puerta del Agua le acompaña el cante de Potito, que se las sabe todas por fiesta. Pedro recupera algunas falsetas de su etapa de acompañante: entre ellas, la que abría el nombrado disco de Carmen Linares, o la que introducía Si te preguntan mi nombre, uno de los temas del Duquelas de La Tobala. Precisamente ella será quien ponga voz al tema Laberinto, una bulería por soleá de gran sabor flamenco, donde escuchamos esa impresionante falseta que servía de introducción al tema que daba título al disco de Carmen Linares, y que en todo este tiempo muchos erróneamente atribuimos a Paco Cortés.
Tanguillos como melismas africano sy la taranta Rumor Sonoro cierran este notable primer trabajo solista de Pedro Sierra, mostrando todo el potencial que muchos le adivinamos en sus primeras grabaciones como acompañante. Cuenta además con una producción impecable y un equilibrio correcto entre tradición flamenca y apertura a otros esquemas sonoros. Y especialmente, deja clara su intención de potenciar la sencillez melódica y la calidez en el sonido, aún sin descuidar el énfasis en la estructura rítmica de los toques. Una tendencia ya común en muchos guitarristas, resueltos por fin en que hacer música, no es alcanzar el más difícil todavía.