Sin que su segundo disco haya cumplido apenas un año, Dieguito «El Cigala» nos dota con un nuevo trabajo discográfico «Corren tiempos de Alegría».
La obra esta producida por Javier Limón que es además el autor de las letras y compositor de casi todas las músicas. Este disco sin apartarse del flamenco jondo incluye en muchos de los cantes ritmos y aires nuevos que vienen dados en gran parte por los colaboradores estelares que acompañan al cantaor como el trompetista de jazz Jerry González o el veterano pianista cubano Bebo Valdés. El Niño Josele que desde hace tiempo es el guitarrista que habitualmente acompaña a Dieguito en sus actuaciones es también en este disco su mano derecha.
La voz de Dieguito recoge los ecos de Camarón de la Isla, pero sin perder nunca su personalidad propia. Su cante es muy gitano, muy flamenco, pero siempre abierto a la modernidad, como demuestra en este trabajo.
El disco comienza con los palos más festeros, una rumba «La Esperanza de Volar» y una bulería «Carmen la Canastera». Ambas canciones presentan unos estribillos pegadizos donde el cantaor es apoyado por unos coros que aportan aun más viveza. Ambos temas son muy flamenquitos y enseguida dan pie a ser tarareados.
En la alegría «Monarcas y Republicanos» ya percibimos los ritmos del jazz, porque Dieguito la canta al son de la trompeta de Jerry González que se adapta perfectamente a los compases flamencos obteniéndose un bonito resultado. También la bulería «Gitano de la Cava» es una suave mezcla de flamenco y jazz.
Sin duda la bulería, seguida de los tangos, es el palo que más presente está en el disco. Precisamente una bulería es el tema que le da nombre «Corren tiempos de Alegría» que a diferencia de la anterior posee ya los ritmos habituales. No quiere decir esto que la cosa no este variada. Si esta última bulería citada es cantada de forma totalmente diferente a la que la antecede, otros aires bien distintos se dan en la denominada «La Fuente del Bebo» ya con el piano de Bebo Valdés. El cubano es además el compositor de la música de este tema, donde se perciben netamente los ritmos de su tierra. Los ecos latinos están muy patentes especialmente cuando entran las teclas del prestigioso pianista que además acompaña a Dieguito en un bonito bolero «Amar y vivir» en el que el cantaor demuestra que se atreve con todo y donde disfrutamos de una original forma de abordar este género con energía flamenca. Para rematar las influencias del continente americano en este disco Diego también canta una Guajira, un palo que vuelven a recuperar los artistas flamencos más jóvenes.
Para demostrar que «El Cigala» además realiza perfectamente los cantes más serios, el disco también incluye una Seguiriya «La Loba» y una Nana «Cadencia Inesperada».
En definitiva el cantaor en este trabajo interpreta los cantes de siempre, y sin dejar de sonar flamencos, introduce en ellos una perfecta fusión trasladándolos a los tiempos que corren.