El bailaor y coreógrafo nos presenta junto al director de escena David Picazo su nuevo espectáculo “Tierra”
‘Tierra’ va a ser una experiencia muy enriquecedora para mí, no solo artísticamente, también en lo personal
Hace unos años, recibía el Premio “Joven Promesa del Flamenco” en el Certamen de Danza Española y Flamenco de Madrid y lo cierto es que este artista no ha decepcionado. Las expectativas se cumplieron y hoy Nino de los Reyes -que además se embarca de gira con Chick Corea- forma parte de esa nueva generación de maestros de la danza flamenca: jóvenes todavía, pero con una gran experiencia y, sobre todo, con muchas cosas que decir. Una de ellas es “Tierra”, que presenta el 10 de junio en el Teatro Rialto de Madrid.
Deflamenco
TIERRA es más que una palaba.
(Nino de los Reyes, NR) Sí. Es un espectáculo en el que intento mostrar las emociones del ser humano, desde la ira, hasta la pena o los sueños que persigo. La felicidad completa o esa plenitud a la que queremos llegar.
La reconciliación con la verdad de lo que es uno, la tregua con la ira para conseguir esa paz interior tan anhelada. En realidad, son emociones que todo el mundo siente en algún momento de su vida, pero las expreso según las vivo yo y según las percibe en mí el director de escena que trabaja conmigo en este espectáculo, David Picazo.
Además de director de escena, David, eres también el ideólogo del espectáculo: la idea original es tuya.
(David Picazo, DP) Yo llevaba tiempo con ganas de hacer un espectáculo flamenco y he tenido la gran fortuna de poder hacerlo con Nino, a quien conozco desde hace varios años. Él fue quien me llamó y después de mucho trabajo hemos conseguido armar castillos en el aire. Hemos fantaseado con el proyecto, hemos imaginado muchas cosas, nos hemos ilusionado mucho y al final, aquí estamos. Yo estoy encantado de trabajar con él porque es un bicho, en el mejor de los sentidos.
Un año de trabajo, nos decíais ¿cómo ha sido ese proceso de materializar esos castillos en el aire?
NR: Sí, al final llevamos un año e incluso más. Yo tenía ganas de hacer un proyecto nuevo basándome en algunas ideas que tenía de antes. Se lo comenté a David y todo ha ido fluyendo. Ha tardado tiempo, pero ahora estamos ya finalizando el proceso de la creación y estoy muy emocionado y muy feliz con lo que está saliendo.
El concepto de tierra parece hablarnos de firmeza, de apoyo, de seguridad… ¿Va por ahí?
DP: Sí, Nino desde el principio tenía esa idea. El título originario era “El ritmo de la tierra”, pero al final se ha quedado en “Tierra”. Es un espectáculo muy personal, de un momento suyo muy concreto en el que el personaje se encuentra un poco en órbita, perdido y necesita volver a la tierra y conectarse nuevamente con él mismo para aceptarse, para saber quién es y para seguir adelante, pero desde una mirada distinta, más aérea podríamos decir.
Acabo de grabar con Chick Corea un disco nuevo, con invitados como Rubén Blades o Diana Krall, y voy a tener la inmensa suerte de poder estar de gira con ellos.
“Fui piedra y perdí mi centro” ¿Algo así?
NR: Pues sí, algo así. En realidad es que este espectáculo es para mí más que un montaje. Estoy seguro de que va a ser una experiencia muy enriquecedora para mí, ya no solo artísticamente, sino también desde el punto de vista personal. Algunas veces le decía a David “¡voy a salir loco!”. Y es que son muchas sensaciones las que hemos manejado y de una forma muy profunda. Estoy en un momento muy especial: me levanto por las mañanas y cualquier estímulo me activa la sensibilidad. Este proceso creativo me va a venir muy bien en mi propio plano personal.
Al final va a ser casi una terapia.
NR: Claro, es que de eso va el espectáculo.
Pues es una suerte que sea así.
NR: Es que trabajamos con las emociones del ser humano, lo que uno va sintiendo en la vida, las cosas buenas, las malas. Y con unas y con otras la vida sigue. Eso contamos en “Tierra”.
Una terapia con muy buenos terapeutas como David Picazo o Florencio Campo, que es otro peso pesado de la danza en nuestro país y que también está colaborando contigo en la coreografía. Y qué decir de Rafael de Utrera, Bandolero y Ñoño, que son unos músicos muy especiales.
NR: Estoy feliz de poder rodearme de la gente que quería porque todos son artistas que me inspiran. Rafael de Utrera no solo es un gran amigo sino una gran figura. Bandolero viene con toda su pedazo de energía y su swing. Ñoño es un gran guitarrista, de una saga impresionante que nos aporta su flamencura y su frescura. Y trabajar con Florencio ha sido siempre uno de mis sueños. Estando con él aprendo en cada momento. Es una suerte para mí el haberme rodeado de todo este elenco de artista a los que admiro. Pero además tendremos a Colin Watson que es un diseñador sonoro, músico y productor electrónico graduado en Berklee College of Music Valencia Campus. También participará Megan Gahudet gracias al apoyo de Pablo Mungia, director del máster en tecnología de la música e innovación en esa misma institución. En ella, Megan ha creado EXLO un sistema que convierte objetos normales en controladores audiovisuales y esta va a ser la primera vez que este sistema va a ser usado en el flamenco.
Siempre me ha gustado aprender, llegar a otros lugares. Me he metido también en el mundo de la electrónica con bases, lupeando, ritmos, percusiones.
Con todos estos elementos nos parece que el espectáculo utilizará el flamenco como lenguaje, pero no será un espectáculo de flamenco tradicional.
NR: Va a haber de todo… Llevo tiempo investigando un poco con el mundo de la electrónica, algo que siempre me ha fascinado, y loopearemos en directo con distintos ritmos, con percusión y espacios sonoros. También habrá esos momentos más puros del flamenco en una taberna con la improvisación como referencia, pasando por distintos palos del flamenco como la solea de Triana, fandangos naturales, tangos y bulería al golpe… Así que habrá de todo. Además, aunque es una sorpresa, lo adelanto: voy a contar con mi amigo Kelian Jiménez, que aunque todos lo conocemos como bailaor también toca la guitarra y es lo que va a hacer el día 10. Así que habrá de todo un poco.
Es verdad que eres un bailaor muy flamenco pero no es menos cierto que tu estética es muy actual, muy urbana, muy de nuestro tiempo.
NR: Soy del 85, nací en Boston y me he criado entre Estados Unidos y España y gracias a mis padres he podido ver muchos tipos de danza, acercarme a muchos ritmos, he escuchado muchas músicas… Igual me metía en una clase de africano que en otra de tap o en una de ballet. Además soy un cuarto filipino y un cuarto americano, así que tengo así que tengo un mestizaje muy grande, y por alguna parte me tiene que salir.
David, qué tal es trabajar con Nino ¿Se deja?
DP: Se deja, se deja. Y de hecho me ha llamado porque quiere que le pasen más cosas en la escena. E incluso tiene un reto para él porque tiene que defender un texto: va a hablar en la escena. Él está apostando y está tirando la moneda al aire a ver dónde cae. Y lo hace con mucha ilusión.
No intento ser distinto porque sí, sino sacar mi personalidad y eso se logra con el tiempo
¿Cómo es “Tierra” desde el punto de vista escénico?
DP: Creo que será sorprendente. He contado con el escenógrafo Alessio Meloni para darle una vuelta a la puesta en escena porque es importante generar no solo ese mundo de emociones con la danza, sino que también el espacio ayude a que pasen cosas para que el pueda desarrollar esas sensaciones tan poderosas con las que trabajamos. Queremos que el espacio sea también su mente, un espacio metafórico, así que rompemos estructuras y jugamos mucho a que pueda pasar de todo.
O sea, que el espacio sea también un personaje protagonista, ¿no?
DP: Es que lo teatral tiene que tener esos componentes: la luz es un personaje, el espacio también, los compañeros… Incluso la regidora va a tener algo que decir en este espectáculo. Yo creo que todo aquel que pertenece a la obra puede aportar mucho en esta función.
Alfonso Losa se enfadó conmigo y me dijo: o haces una cosa nueva tuya o dejo de ser tu amigo. Eso me hizo despertar y a partir de ahí experimenté un cambio muy importante a nivel personal y artístico
Nino, has trabajado con grandes del flamenco como Morente, El Güito, Carmen Cortés, Javier Barón, Pepe Habichuela, Juan Carmona, Josemi Carmona, Guadiana… Has participado en montajes de directores tan prestigiosos como Francisco Suárez, Tony Gatlif o Gerardo Vera. Tienes un Primer Premio de Coreografía Solista en el Certamen de Danza Española y Flamenco de Madrid… Cuando llega el momento de un estreno ¿sientes presión?
NR: Claro, mucha, pero trato de no pensarlo. Ahora mismo necesito estar fuerte con mi baile, tanto física como mentalmente parta poder regalarme el día este 10 de junio y poder expresarme como yo quiero.
También has colaborado nada menos que con Chic Corea y parece que hay más proyectos con él…
NR: Sí, acabo de grabar con él un disco nuevo, My spanish heart. He tenido la suerte de poder estar una semana en estados Unidos con él y con otros artistas que han colaborado como Rubén Blades o Diana Krall. No puedo decir que haya sido un sueño, porque nunca había siquiera soñado con esa posibilidad, pero sí puedo decir que ha sido una experiencia maravillosa para mí. Y además voy a tener la inmensa suerte de poder estar de gira con ellos durante un mes y medio. El 26 de julio venimos al Jardín Botánico de Madrid.
¿Cómo conociste a Chick Corea?
Fue aquí en Madrid. Me llamó Jorge Pardo para que fuera a una fiesta donde estaba Chick y quiso que le conociera. Me llevé mis botas, me pegué unas pataítas y de ahí salió todo. Me llamó después para ir al Blue Note y allí estuvimos cuatro días en el gran templo del jazz. Además estuvimos en el Madison Square Garden de Nueva York.
Algún día tendrás que escribir tus memorias. Seguro que no tienen desperdicio. La primera vez que pudimos verte fue en un espectáculo que hacíais Alfonso Losa, Raúl Ortega y tú. Erais bastante jovencitos. ¿Cómo es el Nino de los Reyes de hoy comparado con aquel artista que estaba entonces abriéndose camino?
NR: Para mí fue un cambio muy grande el certamen de coreografía, y fue gracias a mi amigo Alfonso Losa, que un día se enfadó conmigo y me dijo o haces una cosa nueva tuya y te enfocas o dejo de ser tu amigo. Así me lo dijo. Me acuerdo perfectamente de ese momento. Eso me hizo despertar y meterme en un estudio. Y a partir de ahí experimenté un cambio muy importante a nivel personal y artístico. Desde ese momento todo ha ido viniendo: he ido conociendo a muchos músicos de distintos ámbitos y he podido aprender de todos ellos. Así he podido ir enriqueciéndome como artista y eso es lo que trato de expresar. No intento ser distinto porque sí, sino sacar mi personalidad y eso se logra con el tiempo.