Entrevista y fotos: Rafael Manjavacas
Nos encontramos con Manuel Liñán en una de las salas de ensayo de los Teatros del Canal de Madrid, donde está preparando su próximo espectáculo «Baile de autor» que estrenará en el próximo Festival de Jerez.
El bailaor, coreógrafo y director de su propia compañía Manuel Liñán acaba de ser distinguido con el Premio Nacional de Danza en la modalidad de interpretación, premio que otorga el Ministerio de Cultura, donde el jurado ha destacado “la madurez alcanzada en su trayectoria artística, siendo intérprete especialmente versátil y de gran plasticidad, así como la riqueza de su interpretación, que se nutre de diversas influencias, a la vez que ensancha los horizontes del flamenco”.
En el encuentro, está acompañado por el cantaor David Carpio y el guitarrista Manuel Valencia, están preparando su próximo espectáculo propio Baile de autor, que se estrenará el 24 de febrero de 2018 en la 22 edición del Festival de Jerez.
Las carreras artísticas, en el flamenco, son siempre a largo plazo, ¿se te ha hecho el camino largo?
No, ni mucho menos, realmente me falta tiempo para hacer todo lo que me gustaría. Lo importante es ser constante, estar siempre al pie del cañón, me faltan horas para hacer todo lo que me gustaría o de la manera que me gustaría.
Los premios recibidos, suponen un reconocimiento, y suponen peldaños en tu carrera.
El Premio Nacional ha sido una gran sorpresa, como bailaor o bailarín siempre lo he visto de lejos, nunca me lo podía imaginar. Es un gran impulso, y coger fuerzas para seguir adelante, gratifica todo lo que he hecho hasta ahora, desde que empecé a bailar, a producir o a hacer mis propios espectáculos. Tanto el Premio Nacional como los Premios Max, el de Revelación de Jerez, son impulsos y también grandes responsabilidades.
De alguna forma, tú junto a otros compañeros de tu generación, Marco Flores, Olga Pericet, Rocío Molina… estáis obteniendo el reconocimiento merecido al trabajo realizado.
Si, creo que sí, hemos sido muy constantes, hemos hecho espectáculos por necesidad, con la ilusión de construir y de expresar, los primeros espectáculos quizás no tuvieron tanta salida, el propósito era crear, ilusionarnos y poder expresarnos, hacer espectáculos por la necesidad de contar. Ha costado mucho trabajo, sudor, esfuerzo.
Esta generación de bailaores y compañeros de profesión os habéis ayudado mutuamente, siempre os habéis mezclado entre vosotros a través de colaboraciones.
Si, actualmente hemos dejado de trabajar juntos en el escenario, pero si hemos seguido teniendo colaboraciones entre nosotros, compañeros que me han llamado para preparar coreografías, como fue Rafaela Carrasco, Belén Maya, con Mario Maya tuve el honor de coreografías Mujeres, siempre estamos vinculados de alguna manera.
Has recibido el premio Max dos veces como intérprete y uno más como coreógrafo en tu colaboración con Teresa Nieto, ¿Cómo te ves más cómodo, como intérprete o coreógrafo?
Es muy diferente, ahora en este espectáculo nuevo voy a intentar aunar las dos facetas, coreografiar para mi e interpretarlo. Como coreógrafo para otra persona o un ballet, hay que abandonarse un poco e intentar poner tu mente a la disposición de esa persona o del cuerpo de baile. Ahora estoy en como idear como coreógrafo para mí.
¿Cuáles han sido tus referencias en el baile, de antes y de ahora?
Si te digo nombres se me van a olvidar, tengo muchísimos referentes, de pequeño veía videos de Javier Barón, estudié mucho con Manolete, Mario Maya, grandes referentes para mí, también con Javier Latorre. Luego he compartido muchas experiencias con compañeros como Marco Flores, Olga Pericet, me parece fantástico el trabajo que ha hecho Belén Maya, Rocío Molina. Y referentes clásicos Carmen Amaya, Antonio el Bailarín, Antonio Gades… estarán ahí siempre.
Sobre el baile flamenco, baile contemporáneo. ¿Cómo lo ves en tu caso?
Expresarme como yo sienta, poner en pie lo que quiera contar en cada momento, no intento separar o catalogar lo que es o no flamenco, lo que es o no contemporáneo. El flamenco se ha involucrado y ha tenido relaciones con otras artes, como producto dará una personalidad diferente, pero el flamenco para mi tiene muchos perfiles y maneras de manifestarse, si tuviera solo una cara sería un poco aburrido, no avanzaría nunca.
Hay gente que me ve transgresor por utilizar la bata de cola, y es lo más clásico bailar con bata de cola y mantón. Tampoco he sido el primero, no sé por qué ha sorprendido tanto. He reflexionado mucho sobre esto, me la he puesto sin ponerme en ningún papel, bailar como yo bailo. Si te pones una bata de cola y un mantón en un día de carnaval, que gracioso, pero si te la pones un martes, ya no es lo mismo, al no estar dentro de un contexto, quizás haya chocado por eso.
Que puedes decirme de Baile de Autor.
Baile de Autor tiene un formato muy íntimo. Somos tres, Manuel Valencia a la guitarra, David Carpio al cante y yo en el baile, quería que estuvieran los 3 pilares del flamenco, cante, guitarra y baile. Con esa base construir un espectáculo donde se aúna coreógrafo y bailaor. Necesitaba dedicar un tiempo para mí, la necesidad de crear y bailar tus propias creaciones.
Aún se está fraguando, quiero disfrutar de mis propias creaciones, una manera de autorretratarse. De la forma más minimalista, con el apoyo de una guitarra y un cantaor, es lo que necesito para manifestar mi expresión.
Está enfocado, de alguna forma, para dar a conocer al público, a través de insinuaciones, como se puede dirigir o crear un espectáculo, las cosas que van a pasar, como cambiar la escena, un director de orquesta que dirige como quiere una escena u otra o como iluminar una escena.
Ese trabajo es el que quiero exponer, me imagino como una fantasía, un director que va imaginando, luz, sonido, vestuario, piezas que no tienen nada que ver, pero si exponer lo que pienso, como se manifiesta y como se hace realidad.
Esperamos ser testigos del estreno de Baile de Autor en el Festival de Jerez el próximo 24 de febrero de 2018 y de su posterior evolución, mientras tanto celebramos y te felicitamos por este último reconocimiento tan importante.
