Entrevista: Pablo San Nicasio Ramos
Fotos: Anya Bartels-Suermondt – Universal
«Muchas veces con las intenciones basta para ser flamenco»
La faceta guitarrística de Juan José Suárez Salazar, “Paquete”, no habría quedado del todo clara si no hubiera aparecido este “Mr. Pakett”. Porque, por supuesto, nos quedaba su labor en “La Barbería del Sur” y lo que supusieron sus siete discos. Sabíamos también de sus veleidades acompañantes con tantos artistas, sobre todo Enrique Morente. Pero faltaba dar el paso al frente y salir solo a escena, o por lo menos ser el centro de las luces más fuertes, las que abrasan. Paquete se viste de solista del escenario. Tiene motivos. Nos los explica. Después de siete discos con “La Barbería…” y tu actividad entre bambalinas del flamenco, por fin. “Y ochocientas mil colaboraciones, producciones…sí, yo creo que con cada frasecita o toque mío en los discos de por ahí, si se juntasen ya podía haber salido otro disco mío antes…pero bueno. Es una responsabilidad esto de ser guitarrista flamenco, algo que se merece mucho respeto. He esperado y me quedo tranquilo con lo que he hecho, aunque tampoco le doy muchas vueltas, por si acaso.” “Siempre he sido guitarrista flamenco. Lo que pasa es que a la vez he sido abierto, pero abierto de verdad. Por afición, no por interés material. Y eso me ha hecho juntarme con otros músicos, con otras estéticas… esos nombres que me has dicho son los referentes, son músicos brutales, y yo me identifico con su toque, pero a la vez intento que ellos se reconozcan en el mío.” En el disco se reconoce mucho cante y cuentas con Juan Antonio Salazar, un genio volátil “Es un personaje que a los flamencos nos llena de sabiduría. Es familia mía, viene por mi local a verme. En mi opinión a la hora de componer y pegando pellizcos es único. Es flamenco desde que lo ves. Con las intenciones que tiene. El flamenco es una música que a veces solo con las intenciones vale. Y Juan Antonio en algunas ocasiones amaga y ya te salta el ole. Venía por aquí y yo le pedía letras y tal. Él me las cantaba para orientarme para que las hiciese otra voz, pero claro, es que resulta que nadie mejor que él. Con Guadiana.” Los tuyos siempre presentes “Sí, porque nos juntábamos mucho en Casa Patas y como estoy enfrente pues les llamaba, me los traía. A mucha gente la he arrancado literalmente de la barra de Casa Patas y me los he traído a traición. Y aquí, en el sótano y con los equipos, pues lo he ido haciendo poco a poco. A Montse, al Kiki…” ¿Quién es Dominguito? “Un chaval de Extremadura, familia mía, con una voz impresionante. He apostado también por los jóvenes, tienen derecho a un hueco, por supuesto.” Pero tiras también de los verdaderamente grandes. Por ejemplo, Enrique Morente “Su figura no necesitaba reivindicación, pero yo le he acompañado de manera irregular muchos años, desde que yo tenía diecisiete y tengo cuarenta y seis. Siempre me decía, que tranquilo, que “pasado mañana voy por ahí y grabamos”. Pero fíjate. Cogí esta malagueña, que sale en “Pablo de Málaga” a dos guitarras y la hago a mi versión con una.” Incluyes música turca, además con fruición “Tiene su historia. Dí con Erkan Ogur a través de Tomatito, que escuchó un disco suyo en un bar de Holanda y hasta pidió el disco para saber quién era. Flipó con él. Ya sabes lo que le gusta a Tomate la música turca, ahora va a tocar unos conciertos con Omar Faruk. Me habló de su música y la verdad es que yo también aluciné. Me gustó tanto que cogí muestras suyas y las incluí en mis temas. No sabía como contactar con él, no había manera. Y fue gracias a que empecé a tocar cosas suyas como nos conocimos a distancia, aún no personalmente, y me dio su permiso. Le tengo que mandar una guitarra, que me la ha pedido. Espero verle pronto. Sale bastante en el disco, y podría haber salido más pero no quería abusar de su música que el esto es mío…” Versionas también a Pat Metheny “Sí, quise poner el título original, pero su discográfica no me dejó. Me pidió que pusiera otro nombre y eso…no sé por qué.” “Los músicos somos ya casi como poetas, que hacemos nuestro trabajo, nos vemos con un montón de canciones hechas y estamos solos. Con problemas para colocar todo. Pero Cervantes seguramente tendría que esperar mucho para colocar sus obras. Y Mozart igual” ¿Qué ha provocado Pat Metheny en el flamenco? No se recuerda un músico que haya causado tanta devoción durante tantos años sin ser flamenco “Toca muy bonito. Los flamencos somos gente a los que nos gusta la sensibilidad y la técnica. Él lo tiene todo, armonía, rapidez, lirismo…es que sin saberlo a mí me parece hasta flamenco en algunas vertientes. Es música muy aprovechable para los nosotros. Siempre da en la diana, abarcando tantas estéticas, que parece que saca un disco cada semana. Y nosotros vamos a por lo bueno, siempre.” Los títulos de los temas tienen también historia “El 28 es un tema que va en siete por cuatro, de ahí el nombre. Es la composición más original de todo el disco. Lo oyes en un percusionista o en otro músico y es normal, pero en un guitarrista es algo muy raro. No me siento pionero tampoco. Es una onda que cogí de Sting. Es un musicazo que toca en sietes, en nueves…escuchaba cosas suyas y no le cogía las vueltas. Me obsesionaba con ellas y a base de trabajo conseguí adaptarme a esas métricas.” “Está claro. No obstante tampoco es un disco que tenga alguna escala sobrehumana. En la soleá, como en todo el álbum, busco decir cosas interesantes y flamencas, sin ser pretenciosas.” Tú padre es un portugués de oro “Le cogí del Patas y me lo traje. Le pedí que cantase cosas antiguas, algunas en portugués. Las hizo sin guitarra, con una base rítmica solo y mírale.” “Caramelocura” “Ahí me acuerdo de Caramelo, un pianista cubano que trabaja y vive aquí en Madrid y que para mí es de lo mejor del Mundo. A la altura de los Gonzalo Rubalcaba y compañía. Alguien que nos inspira mucho a los flamencos.” ¿Cómo vas a abordar el directo, por ejemplo, esta noche en Casa Patas? “Una cosa es esto y otra el directo. Y, en general, hay que engrandecer el disco. Me llevaré a Sabú, a Yelsi y a Rafita de Madrid, cantaor de la nueva onda. Se trata de hacer más tiempo que en el disco, que es un suspiro. Un directo siempre debe ser lo máximo del músico.” ¿Y cómo es que no te dio por cantar? “Yo no soy un cantaor frustrado, como dicen muchos guitarristas. Y, si no tocase esto, sería percusionista, como mis hermanos. Fue Juan Antonio Salazar quien me puso a tocar.” ¿El qué? “Falsetas de Niño Miguel que sacaba de oído. Le fue gustando a la gente y me decidí.” “lo mejor para hacer un disco es querer hacer un disco. Nada más. Y en vez de comprarse un coche comprarse un buen equipo. Unos buenos micros, unos buenos previos, moverse y ayudarse a uno mismo. Que haya trabajo y paciencia” Yo destaco de ti tu concepto armónico “Pero es un recurso que no busco como fin. Es bueno porque es útil saber ocho acordes en vez de uno. No se trata de ser sencillo por dejadez. Si uno es sencillo es porque ha dado muchas vueltas y llega a lo sencillo después de lo otro. No por comodidad.” ¿Qué recuerdas del Paquete de la Barbería? “Ingenuidad, en aquella época yo era un poco de eso. Ahora soy más escéptico. Cuando eres joven eres más valiente. Ahora tienes más dudas, es un sí pero no…está bien porque te hace escoger mejor, pero otras veces te paraliza.” Has asesorado e impulsado a muchos ¿Qué les dices? “Que lo mejor para hacer un disco es querer hacer un disco. Nada más. Y en vez de comprarse un coche comprarse un buen equipo. Unos buenos micros, unos buenos previos, moverse y ayudarse a uno mismo. Que haya trabajo y paciencia. Los músicos somos ya casi como poetas, que hacemos nuestro trabajo, nos vemos con un montón de canciones hechas y estamos solos. Con problemas para colocar todo. Pero Cervantes seguramente tendría que esperar mucho para colocar sus obras. Y Mozart igual. No existía lo que hay hoy para darse a conocer, así que…quizá esta sociedad nos está haciendo volver a eso, por lo menos a los músicos.” Cuéntanos lo de tu local-guitarrería “Yo no sé hacer guitarras, pero tengo tantas cosas que necesito espacio. Y nada, alquilé este local a Casa Patas. Vendo guitarras de segunda mano, de buena marca… y bueno, un poco soy como los cocodrilos, que vendo una cada cinco meses o así. Como ellos cuando comen…”
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