Entrevista a Gema Caballero, presenta su nuevo disco «Lo traigo andao»

Gema Caballero - foto Beatrix Molnar

Gema Caballero - foto Beatrix Molnar

Siempre he visto en el folclore una fuente de donde beber y un camino para ir más allá

Con una larga trayectoria profesional a sus espaldas, la cantaora Gema Caballero ha logrado ser una artista perfectamente reconocible. Por su búsqueda, por su forma de entender el flamenco y por su forma de expresarlo, Germa Caballero tiene una personalidad muy definida, que quizá sea lo más difícil de conseguir no solo en el flamenco, sino en cualquier ámbito artístico. Ahorra la cantaora granadina afincada en Madrid presenta su nuevo trabajo discográfico grabado en directo donde expone el resultado de sus investigaciones musicales sobre el repertorio lorquiano, el flamenco y la relación de este género con las músicas de raíz popular. Tras un largo camino, Gema Caballero presenta “Lo traigo andao”.

Gema Caballero – Lo traigo andao (cd)

Deflamenco

Enhorabuena, un gran trabajo en directo

Muchas gracias. Tenía muchas ganas de hacerlo para sentir y transmitir esa emoción que no suele dar la grabación de estudio. Y además estaba en un momento muy especial de mi vida.

“Lo traigo andao” es el título de la Fantasía Popular que cierra el trabajo y que también da título a todo el álbum.  Un título que nos lleva a ese universo lorquiano de las canciones populares.

Me he inspirado en el repertorio que García Lorca hizo con La Argentinita, aquellos temas populares que rescató y que armonizó Federico. Son temas muy conocidos y que se han hecho de mil maneras pero, aun así, a mí me apetecía hacerlo porque quería dar mi visión, mi versión y, en cierto modo, mi homenaje a ese gran intelectual.

Lorca no te cae lejano, todo lo contrario, porque tienes ya mucho trabajo “andao” sobre su obra.

Sí porque he tenido la suerte de cantar muchas veces sus poemas, de muchas maneras diferentes, con muchos artistas distintos. Por ejemplo, con Carmen Linares cuando estuvimos en el teatro Marquina de Madrid o con Rafaela Carrasco y, bueno, en muchas ocasiones más con otros artistas. Pero aparte de trabajar ese repertorio con otros compañeros, siempre me ha gustado hacer también mi propio guiño personal en mis recitales.

Pero no solo de Lorca vive este disco, porque además de esa Fantasía Popular el trabajo incluye también otros estilos y otras creaciones como la zambra, la malagueña, la granaína, los cantes de columpio, la serrana, los caracoles, etc… Y hay algo común en todo el disco porque todo el repertorio, aunque es flamenco, está muy cerca de la música popular Siempre te ha atraído esa frontera entre el flamenco y el folclore.

Sí, hace tiempo que vengo trabajando en ese sentido. Siempre he encontrado mucha cercanía entre el folclore más tradicional y el flamenco. Ese campo me parece una base muy bonita para ir hacia adelante investigando las relaciones entre estos dos mundos musicales. Los cantes del columpio, por ejemplo, me llevan a la bambera de la Niña de los Peines, aparte de que hay letras preciosas en nuestro folclore. La riqueza musical se la aportamos desde el flamenco. Siempre he visto en ese mundo una fuente de donde beber y un camino para ir más allá.

Se ve que hay un trabajo de investigación importante. Resulta muy bonito ver cómo suenan en tu voz flamenca esas melodías tan antiguas. Y los arreglos que les habéis hecho son realmente hermosos.

A mí me encantan esas melodías que puedes escuchar en los pueblos a señoras que quizás no afinen ni las hagan perfectas, pero que transmiten mucha belleza y un cariño muy especial. Y al final, lo que creo que conseguimos es refrescar algo tan importante como nuestro folclore, la música de nuestra tierra.

No trato de innovar, sino de aportar mi personalidad, dentro de mis conocimientos y respetando todos los cantes

 Además, si nos centramos ya en tu interpretación flamenca, vemos que sin salirte de las formas tradicionales de los cantes, lo cierto es que todo parece distinto: no suena a lo mismo de siempre. Lo que habéis dejado grabado suena a Gema Caballero, a Javier Patino, a Javier Morillas y a Raúl Domínguez Soto: los músicos con los que estabas en el escenario. Entre todos creáis un universo musical muy particular.

Javier Patino prácticamente es el 100% de ese trabajo porque ha sabido adaptar perfectamente al concepto del disco, sobre todo en la Fantasía Popular. La música de Patino es perfecta para mí. Y luego, Javier Morillas y Raúl Domínguez han sabido crear también esos ambientes tan importantes en este repertorio.

Es muy interesante esa línea de trabajo porque el flamenco que escuchamos en este disco no trata de repetir lo que hay, sino de respetar las formas y los conceptos haciendo aportaciones y creando más riqueza. Es la línea que seguía tu paisano, el maestro Morente.

Morente siempre me ha transmitido esa forma de hacer las cosas y “Lo traigo andao” no trata de innovar, sino de aportar mi personalidad, dentro de mis conocimientos y respetando todos los cantes.

Quizá los matices, los detalles que hacen que un cante suene distinto estén dentro del propio cante, pero hay que buscarlos. Y buscar siempre es más difícil que romper.

Es nuestra manera de sentir el flamenco. Y como me apasiona tanto la música en general, tampoco concibo hacer el flamenco sin ese aporte de musicalidad que le da en este caso la guitarra de Patino, o el chelo de Javier o las percusiones de Raúl.

Un disco en directo tiene sus riesgos, pero tú tenías la voz perfecta.

La verdad es que sí. Cuando grabamos, en junio del año pasado, tenía una energía muy buena porque estaba embarazada de casi ocho meses. Pensándolo ahora, creo que no lo haría, pero entonces tenía ese punto de locura y de seguridad que te da el embarazo y estaba a tope. Pero es que me apetecía mucho hacer el disco y confiaba mucho en la gente que estaba conmigo. El directo es eso. Puede tener sus fallos, pero tiene una energía especial.

El disco está grabado en el Real Coliseo Carlos III de San Lorenzo de El Escorial, dentro de la programación del Festival Suma Flamenca de la Comunidad de Madrid. Viniste a Madrid hace ya bastantes años…

Sí, buscaba posibilidades para crecer profesionalmente. Aquí estoy en contacto con la danza, que me ha aportado mucho, y tanto este disco como el anterior, De paso en paso, todo está relacionado con mi llegada a Madrid y con los artistas con los que he trabajado.

Artistas de primerísimo nivel como Mario Maya, Belén Maya, Rocío Molina, Rafaela Carrasco, Manuel Liñán, Concha Jareño o Sara Calero entre otros. Por cierto, que con Sara Calero tienes una relación artística diferente, porque eres la directora musical de la Compañía. El trabajo debe ser muy distinto y enriquecedor.

Hay un trabajo de investigación y de comunicación muy intenso con el artista -en este caso con Sara- para saber qué es lo que queremos contar y cómo lo queremos contar, ponerle música, textos… Es un trabajo muy gratificante.

Además has ido desarrollando una faceta interpretativa muy interesante en el sentido de que no solo cantas, sino que también cuentas. Lo hemos visto en tus espectáculos con Sara Calero y también lo encontramos aquí, por ejemplo, en el tanguillo.

Eso me lo han dado las tablas que he cogido trabajando para la danza. Ahí me han dado caña, lo reconozco. Pero es que creo que hay que darle importancia a las letras, y todo llega mejor si además de cantar, lo cuentas.

El directo puede tener sus fallos, pero tiene una energía especial

Al final es buscar la coherencia entre lo que cantas y cómo lo cantas. Y hablando de coherencia, en otra entrevista nos decías que lo más difícil en el flamenco es encontrar la identidad sin dejarse llevar por las modas. Esa idea también expresa coherencia.

Verdaderamente hago lo que siento. Me puedo equivocar y quizá mi trabajo no llegue a muchos sitios donde sí podría llegar haciendo otro tipo de cosas, pero haciendo lo que hago me siento muy bien. Doy gracias por dedicarme a lo que me dedico y por tener lo que tengo a día de hoy. Tengo mi personalidad cantando y soy feliz en esta línea.

Personalidad que expones también en un espectáculo muy interesante junto a otra artista que también tiene una personalidad muy definida, La Tremendita.

Si, CantAhora, se llama el espectáculo.

Las dos estáis solas en el escenario, sin ningún músico más, y defendéis el espectáculo a base de personalidad.

Y me gustaría hacer más veces este espectáculo porque trabajar con ella es genial. Somos amigas desde hace muchos años, la quiero con locura y es una grandísima artista. Nos juntamos dos cantaoras que entendemos el flamenco de forma muy diferente, cada una a su manera y siendo muy fieles a nuestras convicciones. Muy fieles a nosotras mismas.

Hablábamos antes de tu interés por la música tradicional y vemos también que en este nuevo disco, además de la fantasía lorquiana, incluyes una pieza que has construido enteramente con ese material popular: “Inesilla y Brillante”.

Yo le he llamado romance, pero en realidad son “Las bodas de Inesilla y Brillante”, que es un tema que efectivamente he sacado del folclore y cuenta la dote que tienen uno y otro y la historia es muy bonita. La historia es más larga, pero solo he cogido un extracto porque quería construir esa pieza también rescatando las panaderas.

Gema Caballero, gracias por este trabajo y por tu coherencia.

Gracias a ti por darme la oportunidad de compartirlo con los lectores.

En el texto que acompaña al disco, José María Velázquez-Gaztelu afirma que “Gema, con un lenguaje tan verdadero como natural, no rompe con el pasado sino que lo redime y, con la sabiduría del respeto y la poética musical sin ataduras, lo proyecta hacia el futuro”. Después de escuchar este disco no podemos estar más de acuerdo.

 

Gema Caballero – foto Beatrix Molnar
Gema Caballero – foto Beatrix Molnar
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