La Curva, último espectáculo del bailaor Israel Galván, se llevó anoche los elogios de Villamarta en una velada en la que el sevillano mostró su universo dancístico. Acompañado por Inés Bacán,el piano de Sylvie Courvoisier y las palmas de Bobote, Galván conquistó una vez más Jerez dando una nueva lección de maestría.