ANDRÉS MARÍN
Sevilla, 1969
Hijo de artistas flamencos, Andrés Marín ha vivido el arte desde pequeño, tanto a través del baile, con la escuela de su padre, como por el cante, del que es un gran aficionado y largo conocedor. Si hay un rasgo que defina su trayectoria, ese sería el de la independencia y la no adscripción a compañía o escuela alguna más allá de la mencionada enseñanza paterna, de la que se separó para continuar una formación autodidacta. Su carrera profesional arranca en 1992, como solista y coreógrafo, antes de fundar su propia compañía en el 2002. Desde entonces, sus trabajos han sido acogidos por los principales circuitos internacionales, tanto de género flamenco como de danza contemporánea. En la actualidad se presenta como uno de los grandes renovadores del género.
En todas las obras de Marín existe el riesgo y la experimentación, elementos que el artista considera imprescindibles para que el arte flamenco se mantenga vivo.
Tuétano, la última creación de Andrés Marín, es un viaje a lo más profundo, a lo más orgánico. Marín se inspira en los textos del poeta Antonin Artaud y cuenta con la colaboración especial de los artistas Concha Vargas y la Macanita. Coproducido y estrenado en Francia en el Festival Montpellier Danse 2012, el espectáculo se representa por primera vez en España en la XVII Bienal de Flamenco de Sevilla.
Marín da cauce a su doble pasión, la de innovar y la de ser fiel a la tradición, en La pasión según se mire. Para ello el artista escoge las aportaciones de tres invitados irrepetibles: Lole Montoya, Concha Vargas y José de la Tomasa. Estrenado en 2010 en el XIV Festival de Jerez, el espectáculo es aclamado unánimemente por el público y la prensa especializada. En su paso por la XVI Bienal de Flamenco de Sevilla es galardonado con dos Premios Giraldillo. En 2011 el espectáculo se presenta en espacios como el XVIII Festival de Nîmes, la Maison des Arts de Créteil o el Lucent Danstheater.
En El cielo de tu boca, cuyo estreno es acogido en la XV Bienal de Flamenco de Sevilla en 2008, Marín baila sobre la música de las campanas que tañe el compositor experimental Llorenç Barber. La obra inaugura la II Bienal de los Países Bajos, viajando después por espacios contemporáneos como el Mercat de les Flors en Barcelona, el festival MiRA!, Montpellier Danse o el Festival de Danse de Cannes en Francia. Se presenta en el ciclo Flamenco Viene del Sur en Granada y Málaga, el Teatro Falla de Cádiz, el XVII Festival de Nîmes y la Sala Pleyel entre otros eventos. Fruto de esta colaboración entre Marín y Barber nace Somos Sonos, una propuesta que se adentra en el territorio de la performance, un diálogo abierto entre los artistas, audaz y despojado de artificios.
Tomando como punto de partida la libertad de expresión que caracteriza su carrera, Marín crea Vanguardia Jonda y Op.24, dos espectáculos intimistas que sirven de laboratorio de creación personal del bailaor y que han sido acogidos por diversos espacios Europeos como el Festival de Mont de Marsan, la Bienal de la Danza de Lyon, o el Festival Paris Quartier D’Été.
Otras obras con firma de Marín son también El alba del último día y Asimetrías, creadas las dos para la Bienal de Flamenco de Sevilla en 2004 y 2006 respectivamente. Más Allá del Tiempo, su primer espectáculo, se estrenó en 2002 en la Maison de la Danse de Lyon.
Además de su actividad al frente de su compañía, el bailaor ha colaborado con Blanca Li en el espectáculo Poeta en Nueva York, desempeñando el papel de Lorca, y ha realizado numerosas grabaciones para el Canal Arte en espacios como la Maison de la Danse, compartiendo escenario con coreógrafos como Jirí Kylián y Bill T. Jones. El artista también dirige Andrés Marín Flamenco Abierto, estudio de baile y oficina de producción con sede en Sevilla.
Foto: Christian Ganet
